20 euros al día, una cámara en mano y una mochila cargada de ilusión. Es todo lo que ha necesitado Sergio Otegui (Zaragoza, 1989) para recorrer más de 20 países en seis meses al estilo 'Nada Incluido', como así se llama el blog en el que narra sus viajes a modo de guía para los aventureros. ¿Las claves? Evitar gastos excesivos de transporte y encontrar alojamientos gratuitos a través de la web Couchsurfing. 

"Todo comenzó hace tres años, cuando vi el blog de un chaval que viajaba por Europa aplicando métodos de ahorro y quise hacer lo mismo. Siempre que puedo me muevo haciendo autoestop y no me importa compartir habitación con otras 15 personas", explica este Licenciado en Comunicación y Publicidad y Relaciones Públicas, quien asegura que se puede disfrutar al máximo de cualquier país y su cultura "sin necesidad de visitar los puntos más turísticos, o los tres o cuatro espacios más famosos".

Su primera experiencia de este tipo fue en 2012, cuando marchó a la Eurocopa de Ucrania y Polonia junto a varios amigos. "Fue increíble porque salimos sin apenas dinero y acabamos viendo los partidos con las familias de los jugadores. Surgió gracias a una entrevista televisiva en la que contamos lo que estábamos haciendo por allí. El hermano de Fernando Llorente se enteró y quiso invitarnos a varios encuentros", recuerda.

Tras Ucrania y Polonia, ha tenido el gusto de visitar Italia, Eslovenia, Hungría, Eslovaquia, República Checa, Lituania, Letonia, Estonia, Finlandia, Suecia, Croacia, Bosnia, Montenegro, Macedonia, Malasia, Tailandia, Camboya, Singapur, Costa Rica y Perú, siendo este último país el más económico. "El valor de la moneda en Perú es cuatro veces inferior al euro. El gasto medio estuvo por debajo de los 20 euros al día", señala. Al extremo opuesto, el norte de Europa: "Suecia y Finlandia son los países más caros que he visitado. Fue muy complicado cuadrar el presupuesto como estaba planeado".

Aún así, celebra no haber vivido ninguna situación realmente comprometida por no llevar dinero: "Los momentos más complicados han llegado por algún conflicto personal, cuando he viajado acompañado y han surgido discusiones por el cansancio, por poner un ejemplo". Y es que, en su opinión, disfrutar del viaje "depende mucho del momento que vives a nivel emocional". 

Por ello, no se atreve a destacar un destino por encima de otro: "Cada viaje se ajusta a tu momento, tiene distinto contexto y se vive de una forma".

Su próximo proyecto, una ruta por Latinoamérica en febrero, cuando espera tener cerrada la forma de obtener rendimiento económico de su blog. "Supera los 15.000 visitantes únicos mensuales y la idea es explotarlo a corto plazo. Creo que este tipo de herramientas deberían servir para abrir la mente de las personas y que se den cuenta de que no pasa absolutamente nada por meter a un desconocido en tu casa", concluye.