Austeridad en el recuerdo

Los aragoneses gastarán es este día 20 euros de media en flores, la mitad que en 2008.

El cementerio de Torrero recibirá la visita de más de la mitad de los habitantes de Zaragoza
Austeridad en el recuerdo
Laura Uranga

La proximidad del día de Todos los Santos trae consigo una multitudinaria visita al cementerio para honrar a familiares y amigos. Así "más de la mitad de los habitantes de Zaragoza", según datos del Ayuntamiento, acudirán a Torrero para limpiar las lápidas, colocar flores frescas y recordar a aquellos que ya no están.


Ante la afluencia de gente, el Consistorio se ha puesto manos a la obra para facilitar el acceso al camposanto, incluyendo refuerzos en los autobuses o aumentando las plazas de aparcamiento. El día es especial para todos, también para las floristerías, que ven cómo sus ventas suben en lo que para ellos es una fecha "incomparable con otra del resto del año", asegura Cristina Villafranca, propietaria de la Floristería Cristiana, situada cerca del cementerio.


Los precios de las flores aumentan en un día tan señalado ya que los comerciantes aprovechan su tirón: "Las rosas pasan de 4 a 5 euros, y las flores variadas cuestan 50 céntimos más" dice Villafranca que además justifica el incremento: "La subida del IVA nos destrozó y asumimos los costes, hace casi cinco años que la venta de flores está muy estancada, pero aún así en Todos los Santos recibimos un 200% más de gente que en cualquier otro momento" explica.


Predominan las flores rojas y blancas, pero aunque las tradiciones se mantienen, el gasto no. Desde Decoflor, una floristería que lleva años en la Asociación de Floristas de Aragón, confirman que los aragoneses se gastarán el 1 de octubre de este año “entre 15 y 20 euros por los 40 que se dejaba la gente en 2008”.


Este ahorro corresponde a la situación económica actual y también al “intrusismo” denunciado por las floristerías: “En estos días previos a Todos los Santos venden flores hasta los supermercados, cualquier sitio tiene ramos ya hechos y tristemente la gente mira más el precio que la calidad”, dice Marta Bertomeu, de Decoflor.


El 1 de noviembre también es un día de encuentro, una fecha señalada donde las familias se reúnen para limpiar y adornar las tumbas de sus seres queridos. Una vecina zaragozana explica la importancia del evento: "Todos los meses limpio las lápidas de mis padres, que ya fallecieron hace años. Les pongo flores artificiales y retiro las que están en mal estado, pero en Todos los Santos vengo con mi hermano que vive fuera y las ponemos naturales. Este día es especial", sentencia.

'Escaleristas' por la voluntad


Pese a que el propio cementerio ofrece un servicio de escaleras y desde septiembre incluyó la posibilidad de trasladarlas hasta el lugar deseado a un precio de 5 euros, hay otras empresas que también ofertan a sus clientes un servicio de limpieza completo que incluye poner flores o quitar la suciedad del nicho cuyos precios oscilan entre los 10 y los 15 euros.


Estos servicios están reventando el negocio de los autodenominados 'escaleristas', que aprovechando la inaccesibilidad de los nichos altos en la parte antigua, consiguen algo de dinero: "Nos están quitando el pan de la boca", dice tajante José Fernández, un hombre que lleva meses yendo al cementerio a ofrecer su escalera.


Tanto él como sus compañeros se quejan no solo de las tarifas, también de la publicidad que algunas empresas están haciendo y contra la que, aseguran, no pueden competir: "Nosotros no tenemos precio, pedimos la voluntad. Antes, en un día normal me podían pagar alrededor de 40 o 50 euros, desde que están estas empresas pasa la mañana y con suerte me he llevado un euro", dice otra de las personas que se dedica a esto.La tecnología llega a los cementerios


En estas fechas, el sector funerario suele presentar sus novedades, y las que se van conociendo este año pasan todas por la intervención tecnológica. Desde la inclusión de plasmas con fotos del finado en los velatorios, hasta servicios de pésame a través de SMS, que ya ofrecen algunos tanatorios.


El clásico recipiente para las cenizas ha dado paso a cinerarios decorados y personalizados para la ocasión. Lo mismo ha ocurrido con las placas conmemorativas que ahora pueden ofrecer imágenes personales en homenaje a la persona fallecida.


Las lápidas también se alejan de lo tradicional ofreciendo colores, paisajes, retratos, y cualquier posibilidad artística deseada. La personalización, gracias a las plataformas web, es total. Ya existe la posibilidad de recordar al fallecido mediante lápidas que contienen un código QR. Gracias al escaneo de este desde el móvil o la tablet, se conecta directamente con un espacio 'online' donde está la memoria de la persona, su biografía, un libro electrónico o un vídeo recordatorio.