El Diablo se exhibe en el chupinazo de Monzalbarba

El nuevo cabezudo fue el pregonero en el comienzo de fiestas para los más pequeños

Las reinas de fiestas lanzan confeti y caramelos desde el balcón del Ayuntamiento.
El Diablo se exhibe en el chupinazo de Monzalbarba
Asier Alcorta

"Es de color verde, echa humo y tiene muy mal genio:  saludar a ¡El Diablo!". Así fue presentado el nuevo, y más fiero, de los cabezudos del barrio rural de Monzalbarba, durante el pregón infantil que él mismo leyó ante decenas de niños que esperaban ansiosos conocer al nuevo personaje.


"Niños y niñas de Monzalbarba, este año os voy a hacer correr más que nunca", gritó El Diablo con voz tenebrosa. Solo el sonido de tres cohetes, que daban comienzo a las fiestas, y la lluvia de caramelos y confeti consiguieron sacar de su asombro a los más pequeños, ante la gran sorpresa que había producido la llegada de un pregonero tan grande: "¡no me los esperaba!" le decía un niño a su padre. 


Aunque con cierta temerosidad, y a una distancia prudencial en los primeros instantes, todas las miradas estaban puestas en el nuevo cabezudo que, en su presentación al público, estuvo más de diez minutos saludando y retratándose junto a numerosos niños, como si de una ‘celebritie’ se tratara.


No es para menos, los cabezudos habían "pedido refuerzos ya que los niños de Monzalbarba son  los más gamberros, los más provocadores y los que más corren" de toda la comarca, señalaba el presentador del acto ante los vítores de los vecinos congregados en la plaza.   Cuatro días de fiesta

El pregón de los adultos, que estuvo bañado por un cañón, que lanzó cantidades ingentes de espuma, no llegó hasta casi pasada la medianoche, tras terminar el original concurso de carrozas para el que los vecinos llevaban trabajando durante varias semanas.


Las fiestas continúan hoy, y hasta el próximo domingo, con muchas actividades dedicadas a los más pequeños, entre los que destaca una yincana fotográfica.