El abogado del empresario Carmelo Aured, César Ciriano, ha anunciado que presentará un recurso de apelación ante el Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA) contra la sentencia condenatoria dictada este miércoles por el magistrado-presidente del tribunal del jurado, Alfonso Ballestín, perteneciente a la Sección Sexta de la Audiencia Provincial de Zaragoza.

Ciriano ha confiado en que el fallo que emita el TSJA sea "el preludio de la absolución y la inmediata liberación" de Aured, que permanece en prisión por otro delito.

Asimismo, ha avanzado que presentará un recurso de casación ante el Tribunal Supremo (TS) en que solicitará que se anule a su cliente la acusación del delito de tráfico de influencias por el Caso Molinos --sobre un asunto de posible corrupción urbanística en La Muela-- al argumentar que "se basa sobre unas escuchas telefónicas que creemos se deben anular".

Carmelo Aured ha sido condenado a seis meses de prisión como autor responsable de un delito de tráfico de influencias, con la accesoria de inhabilitación especial para el ejercicio del derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena. Además, deberá hacer efectiva una sexta parte de las costas del juicio.

El fallo de la sentencia impone también para el exconcejal socialista del Consistorio zaragozano, Antonio Becerril, seis meses de prisión por un delito de tráfico de influencias, con la accesoria de inhabilitación especial para el derecho del sufragio pasivo durante este tiempo, e inhabilitación especial para empleo y cargo público durante tres años.

Asimismo, deberá pagar una multa de seis meses, con una cuota diaria de 10 euros por un delito de negociaciones prohibidas a funcionario público y abuso en el ejercicio de su función, y deberá abonar dos sextas partes de las costas del juicio.

Juicio de faltas

Ciriano ha reiterado que "estamos convencidos de que mi cliente es totalmente inocente de lo que se le acusa" y ha recordado que en la sentencia el magistrado ha eliminado la multa de mil euros que solicitaba la fiscal y el veredicto del jurado popular. 

Ha argumentado también que el artículo 429 del Código Penal dice que el tráfico de influencias tiene que devenir en un beneficio, pero el juez "discrepa del jurado implícitamente al eliminar la multa lo que nos abre el camino a la apelación ante el TSJA para la absolución".

Ciriano ha explicado que al condenar a Aured a una pena de 6 meses de prisión por un delito cometido en el 2009 cuando "no tenía antecedentes penales" la legislación penitenciaria permite sustituirla por una sanción económica y entonces, en la práctica, sería un juicio de faltas".

Para este letrado, tras cinco años de investigación con el "montaje" del jurado popular "todo ha quedado reducido a un juicio de faltas" y ha incidido en que "este juicio nunca se debió haber celebrado".