80.000 personas se han subido ya a la noria

La atracción se instaló el pasado septiembre para funcionar durante las Fiestas del Pilar, pero se quedará en Zaragoza hasta el próximo 12 de enero.

Zaragoza, a 70 metros de altura
Zaragoza, a 70 metros de altura_3
TONI GALAN/ A PHOTO AGENCY

Unas 80.000 personas han subido a la noria instalada junto al zaragozano puente de Santiago desde el pasado 18 de septiembre hasta el día de Navidad, una cifra que la empresa asegura que estaba dentro de sus previsiones.


"Ha sido una buena acogida y esperamos que en lo que queda de Navidad siga a buen ritmo, ya que es una atracción familiar", explicaban fuentes de la administración de la empresa que gestiona la noria Mirador Princess. Un ejemplo de ello era Maite, que acudió con su familia. "Hemos bajado al centro y nos apetecía subir y ver la ciudad de noche", indicaba.


No era el caso de la pequeña Leire, que ya había subido una vez y quería repetir, esta vez acompañada de su tío Paco. Ella lo tenía claro: lo mejor son "las vistas". Además ella, como todos los menores de 1,20 metros tiene descuento: pagan 3 euros, frente a los 5 de la entrada general.


Leire no es la única que repite. "Muchos usuarios nos han comentado que vuelven con la familia que viene de visita". O acompañados de amigos, como Marta. Junto a Laura, Patricia, Claudia y Miguel quería revivir una experiencia que le había gustado mucho la vez anterior. No todos estaban tan seguros de querer ascender los 70 metros de altura que tiene la atracción, pero los ánimos del resto del grupo les convenció para subirse y ver la ciudad.


"Los comentarios son muy positivos y la noria se ha integrado perfectamente en el paisaje", aseguran desde la empresa, que subraya la "buena imagen" que da a la ciudad. Tal ha sido el éxito, que aunque en un principio solo iba a quedarse para las Fiestas del Pilar, se amplió hasta el próximo día 12 de enero. La empresa no prevé una nueva ampliación, aunque desde el Ayuntamiento estudia establecer una noria permanente y de mayor envergadura.


Por ahora, la actual da trabajo a cinco personas entre semana, a las que se añaden dos o tres más durante los fines de semana, cuando se acerca más gente a ella.


Hasta el tiempo se ha comportado con ella. "Solo hemos tenido que cerrar un par de días", aseguran. El viento es uno de sus enemigos, aunque puede soportar rachas mayores a las registradas durante estos tres meses. Sin embargo, los clientes quisieron subirse los días de mayor cierzo ya que "no se disfrutaba".


Lo mismo ocurre con los días de niebla, en los que el paisaje, el mayor atractivo de la noria, no podía contemplarse. La Navidad, con buenas temperaturas y días soleados (y también con sus vacaciones), ha provocado que muchos se animasen a conocer Zaragoza de una manera nueva.