Zaragoza

El 80% de los proyectos que plantan su semilla crecen en Zaragoza Activa

La IV Edición del Semillero de Ideas ha contado con una participación de 72 proyectos. Las TIC, la economía verde y del conocimiento y las industrias creativas o culturales serán los perfiles predominantes.

Promotores de Qbitera
El 80% de los proyectos que plantan su semilla crecen en Zaragoza Activa

 El Semillero de Ideas cerró hace tan solo unos días la convocatoria de su cuarta edición. Aunque no han superado la cifra del año pasado, cuando se llegaron a alcanzar las 80 solicitudes, este septiembre han vuelto a conquistar el éxito con un total de 72 solicitudes. Y es que desde hace tres años, la gente con ideas tiene un nuevo lugar en Zaragoza para incubar y ver crecer su idea.


Ahora, se trata de seleccionar 20 start ups (empresas basadas en la innovación, desarrollo de tecnologías, creación de empleos de calidad…). Para ello, en los próximos días se seleccionarán 40 proyectos que participarán en unos pequeños talleres donde deberán de presentar sus ideas antes una comisión integrada, entre otros, por profesores de la Universidad, consultores de prestigio o técnicos municipales. Y de ahí saldrán los seleccionados. “Aunque la idea es fundamental, es cierto que muchas veces se apuesta más por el jinete que por el caballo”, apunta el director de Zaragoza Activa, Raúl Oliván.


“Todavía es muy pronto para adelantar qué proyectos entrarán a formar parte del semillero de este año, pero sabemos con seguridad que los sectores que predominarán serán los proyectos TIC, los relacionados con la economía verde y del conocimiento y también los relaticos a las industrias creativas y culturales”, explica Oliván.


El Semillero de Ideas, con tan solo tres ediciones, ha sido mencionando como una de las 56 buenas prácticas locales en el mundo por la Fundación Alternativas y como “uno de los 10 mejores proyectos formativos de España” según la Fundación tripartita para la formación en el empleo. Y ahora, suma y sigue con su IV Edición.


Los datos, sostienen estos reconocimientos. “Un 80% supera todo el proceso de construcción de la empresa. El otro 20% sale del Semillero por una oferta laboral, y cuando se trata de garantizarse un sustento, nosotros somos los primeros en alegrarnos”, detalla Oliván. Además, de los que acaban en el Semillero, dos tercios acaban montando el proyecto que presentaron y el tercio restante, o bien cambia su idea de negocio, se une a otros proyectos o incluso vuelve a la Universidad para seguir formándose.

QBITERA entró como una fantasía y sale hecha realidad

Mateo del Río, Carlos Vicente y Alfonso Escriche tienen 24 años y estudiaron Ingeniería Informática juntos. Están especializados en diferentes ramas, lo que les ha venido genial para forjar QBITERA. El lema de su proyecto es: “Muévete, comparte y disfruta” y está dirigido al desarrollo de Software para dispositivos móviles, con apoyo en tres pilares: geoposicionamiento, interacción social y realidad aumentada. “En la Universidad tuvimos que trabajar mucho en equipo y allí nos dimos cuenta de que teníamos potencial para poner nuestro propio proyecto en marcha”, cuentan los jóvenes.


Así que sin darle demasiadas vueltas, el pasado verano se lanzaron a la piscina y empezaron a investigar cómo empezar su andadura emprendedora. “Así fue como conocimos a Zaragoza Activa y por eso nos apuntamos al III Semillero de Ideas”, recuerdan echando la vista un año atrás. “Nuestro paso por el III Semillero de Ideas nos ha servido para terminar de concretar nuestro proyecto, lo justo sería decir que entramos allí con poco más que una idea o una fantasía, y salimos con un proyecto real”, confiesan.


Ahora, a finales de mes van a entregar un proyecto para Tempo Finito, una empresa de organización de eventos deportivos y, gracias al “boca a boca”, varias personas se han puesto en contacto con ellos para plantearles nuevos proyectos. “Además, nuestro objetivo ahora es seguir desarrollando aplicaciones propias, principalmente en el ámbito del turismo y el ocio”, explican.


En un ámbito como en el que ellos se mueven, el tecnológico, no hay barreras geográficas, por eso, aunque sus miras están puestas a nivel nacional, no descartan tener presencia en el extranjero a medio plazo. “Lo mismo nos da que el cliente esté en Tauste que en Pekín, porque con nuestras herramientas podemos trabajar desde cualquier parte del mundo”, concluyen.

Cool Everywhere, listo para enfriar en diciembre

Paola Fatás tiene 29 años y es Doctora en Química por la Universidad de Zaragoza. Hace poco más de un año acababa de presentar su tesis doctoral y decidió que era el momento de sumergirse en el mundo empresarial porque siempre le había rondado por la cabeza la idea de montar algo.


La bombilla se le encendió un día de verano mientras practicaba deporte. “Hacía calor y tenía sed, pero no hubo manera de encontrar una bebida fría, así que me pregunte: ¿Cómo es posible que en pleno Siglo XXI no sea posible enfriar una bebida al instante y en cualquier lugar?”, recuerda Fatás.


Ella siempre había jugado a baloncesto y recordó que en el botiquín solían llevar una bolsa para los esguinces de tobillo que se enfriaba con un golpe y se puso a investigar. “Así empezó Cool Everywhere”, apunta la joven química.


Redactó su proyecto sin pensarlo y lo presentó al III Semillero de Ideas. Consiguió entrar a formar parte de Zaragoza Activa y, después de una año, ya tiene su propia empresa constituida. “Ahora mismo, junto al equipo de diseñadores AM desarrollo, estamos haciendo el prototipo final que si todo va bien estará listo en diciembre”, explica Fatás. “Una vez comprobado el funcionamiento, el siguiente paso será preguntar a los potenciales clientes si les gusta el proyecto ¡Y esperamos que digan que sí!”, añade.


Todo el que lo desee puede seguir la evolución de este proyecto a través de las redes sociales y aportar sus opiniones. “¿Os imagináis tomando una cerveza fría en una playa desierta? ¡Eso es una #coolexperience!”, concluye Paola Fatás.