Urbanismo

Los vecinos de Miralbueno exigen que el plan de 1.500 viviendas implique nuevos servicios

Denuncian la falta de una escuela infantil y un centro de día y reclaman mejoras en el transporte público y más espacioen el centro cívico

Miralbueno es uno de los barrios que ha experimentado un mayor crecimiento urbanístico en los últimos años
Los vecinos de Miralbueno exigen que el plan de 1.500 viviendas implique nuevos servicios
ASIER ACORTA

Zaragoza. Los vecinos de Miralbueno se mostraron el lunes satisfechos de que su barrio siga creciendo con nuevos planes urbanísticos y que atraiga a nueva población, especialmente a jóvenes. Pero expresaron una preocupación: que los servicios públicos del distrito se queden cortos tras la llegada de nuevos residentes, especialmente después del acelerado crecimiento que se ha producido en los últimos años.


Así recibieron los representantes vecinales de Miralbueno la decisión de la junta de compensación de una de las zonas de expansión del barrio de sacar a concurso la ejecución de las obras de urbanización, que tienen un presupuesto de 7 millones de euros, IVAexcluido. «Estamos encantados de que llegue gente nueva al barrio, pero nuestros servicios públicos se quedan cortos», afirmó el presidente de la Asociación de vecinos San Lamberto, Luis Gargallo.


En total, el proyecto, que se aprobó en mayo del año pasado, prevé habilitar suelo para construir un total de 1.438 pisos, de los que 758 son de protección oficial y 680 de precio libre. Los propietarios están liderados por Hispano-Pirenaica de Gestión, que incluso ya ha anunciado tres promociones en el sector, dos de 102 viviendas y una más de 50.


La urbanización está próxima

Los trabajos aún no se han adjudicado, dado que el plazo para presentar ofertas concluyó el 1 de julio y hay dos meses para que la Junta de Compensación tome una decisión. El proyecto estima en 18 meses la duración de las obras. Fuentes consultadas creen que las máquinas podrían empezar a trabajar en los próximos meses, incluso antes de que acabe este año. El último trámite que queda pendiente es la reparcelación del sector, que se ha retrasado por la negativa de algunos pequeños propietarios a entrar en la junta de compensación. Por este motivo, no se descarta recurrir a la vía de la expropiación forzosa para desbloquear el problema.


Esta iniciativa urbanística, que forma parte de un sector más amplio en el que el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) prevé la construcción de 7.331 pisos, se suma a otras promociones que han visto la luz en Miralbueno en los últimos años y que han elevado notablemente su población. No en vano, si en el año 2004 este barrio zaragozano tenía 6.087 habitantes, según datos del padrón municipal, en 2013 esta cifra ha alcanzado los 13.996. El incremento demográfico ha sido de cerca de un 130%.


De este aumento de población en el barrio son muy conscientes en la asociación de vecinos San Lamberto de Miralbueno. Luis Gargallo consideró positivo que se sigan planteando proyectos urbanísticos y citó la mejora que se puede producir en el entorno de la ronda de Ibón de Plan si finalmente se pone este en marcha. Pero expresó su temor de que los servicios se queden cortos. «Si seguimos creciendo, habrá que tener en cuenta los servicios», dijo el dirigente vecinal.


«Ojo con los servicios»

Gargallo explicó que en los últimos años se han construido dos colegios y el centro de salud. Pero subrayó: «Ojo con los servicios y los incrementos de población. Con 1.500 viviendas, a medio plazo pueden instalarse en el barrio otras 3.000 personas. Nos hicieron un centro de salud muy majo, pero habría que incrementar el personal sanitario y los médicos», aseguró. Recordó que la zona que se quiere desarrollar está a escasos 300 metros del centro de salud, hecho que a su juicio justifica su reivindicación de reforzar la plantilla.


En este sentido, Gargallo destacó que el barrio, pese a la evolución experimentada en los últimos años, sigue careciendo de un centro de día para mayores y de una escuela infantil municipal.«Y el centro cívico ya se queda pequeño», explicó el responsable vecinal.


Por otro lado, hizo hincapié en la situación del transporte urbano, que es una de las principales reivindicaciones del distrito. «Si ese sector se desarrolla debería haber una línea de autobús, porque la parada más próxima queda a 500 o 600 metros», destacó el dirigente vecinal. Por eso, defendió la prolongación de la línea 21, que llega hasta Oliver, para dar servicio a las nuevas urbanizaciones de Miralbueno. Además, reclamó que se mejore la frecuencia de las líneas 52 y 53.