DÍA DE ARAGÓN

Recogen miles de firmas en comercios para no trabajar en San Jorge, en plena Semana Santa

El 23 de abril coincide en 2011 con el Sábado Santo y la DGA lo ha marcado como una de las aperturas en festivo.

Las dependientas de la tienda Bora firman en presencia de miembros de OSTA.
Recogen miles de firmas en comercios para no trabajar en San Jorge, en plena Semana Santa
ESTHER CASAS

La próxima Semana Santa coincidirá con el día grande de Aragón, San Jorge, un hecho poco frecuente. El puente del 21 al 24 de abril de 2011 no se presenta cómodo para los trabajadores de comercios, al contrario. La DGA contempla el sábado 23 como una de las ocho aperturas de establecimientos fijadas en festivo, lo que ha causado un fuerte malestar entre los empleados del sector, que ven mermados sus derechos en una jornada tan simbólica. Algunos sindicatos han recogido ya miles de firmas para instar al Gobierno a que recapacite y anuncian campañas y movilizaciones.


El año que viene la tradicional reivindicación de San Jorge se mezclará con la pasión y el fervor religioso de un Sábado Santo, un azar del calendario en el que los trabajadores se consideran perjudicados por la medida adoptada por el Gobierno aragonés. La orden aprobada en septiembre por la Consejería de Industria, Turismo y Comercio para regular la apertura comercial en domingos y festivos afecta, sobre todo, a las grandes superficies. Los locales cuya zona de venta no supera los 300 metros cuadrados y además no pertenecen a ninguna cadena gozan de libertad de apertura y horarios. No obstante, bastantes tiendas pequeñas y medianas se verán obligadas a abrir el 23 para no perder clientela.


La realidad es que, sí o sí, hay que fijar una apertura en festivo el puente del 21 al 24 de abril. Por ley no se puede estar más de tres días cerrado al público. El problema para los asalariados es que el 23 cae justo en medio y es una jornada tan especial como la del patrón.


Los sindicatos han movido ficha y se van a hacer notar, aunque aún falten siete meses hasta abril. La Federación de Trabajadores Independientes de Comercio (Fetico) y la Organización Sindical de Trabajadores de Aragón (OSTA) han empezado a recoger firmas, la primera a nivel regional y la segunda, de momento solo en el ámbito de Zaragoza, donde lleva más de 4.000 rúbricas.


Por su parte, la Federación de Asociaciones Sindicales de Grandes Almacenes (Fasga) ha enviado una carta de queja a Industria. UGT anunció ayer que la semana que viene mostrará las iniciativas relativas a este asunto, y CC. OO. también ha manifestado su oposición a que San Jorge sea una de las aperturas en festivo.


"Situación extraordinaria"

Concha Molina, secretaria general de Fetico en Aragón, La Rioja y Navarra, calificó de "situación extraordinaria" la coincidencia de la Semana Santa con San Jorge y, como tal, pidió al Ejecutivo autonómico que tenga la deferencia de cambiar la fecha de apertura. La alternativa, a su juicio, sería colocar el festivo el jueves 21 o el domingo, día de Resurrección. Recordó que, por lo general, los trabajadores de comercio "no libran nunca el sábado".


"Lo que queremos es que se tenga en cuenta que los trabajadores de comercio también tenemos familia", apuntó Molina. El enfado, por tanto, reside en que no se respeta la necesaria conciliación entre la vida laboral y la personal. Sobre las firmas, dijo que no se han dado ningún plazo para terminar la campaña, por lo que esperan recoger miles. Primero entre las grandes superficies, y después entre pequeños comercios e incluso clientes. Asimismo, mandarán un escrito a la Consejería. Aún no han previsto otras actividades de protesta.


Más beligerante se posicionó OSTA. Roberto Seral, responsable del sector del comercio, advirtió de que, si no les escuchan, no descartan, "como última medida de presión", convocar una huelga. Por lo pronto recogen firmas, también entre el pequeño comercio, y más adelante entre la ciudadanía en general. Añadió que prevén sumar fuerzas con otros sindicatos en este punto. En la nota que acompaña a la hoja de las firmas, OSTA expone que "el 23 de abril debe seguir siendo un día de carácter lúdico y reivindicativo", no una jornada de trabajo para unos y consumo para el resto. "No hay que tolerar que ninguneen este día y con ello nuestra identidad", insisten. Seral destacó que, más allá de San Jorge, defienden que no haya que trabajar ningún domingo ni festivo.


Desde Fasga, Julia Escuer, su responsable regional, explicó que creen que abogan por la vía del diálogo para hallar una salida al conflicto. Una de sus primeras acciones ha sido remitir una queja formal al Departamento de Industria. En la misma traslada a la DGA el malestar generado y le hace llegar la importancia que tiene para los trabajadores disfrutar con familiares y amigos del "orgullo de ser aragonés".


"No entendemos cómo el día en el que celebramos nuestra fiesta autonómica es la administración regional la que impide que disfrutemos de un hecho tan destacado y que incide directamente en el interés que compartimos con usted por la conciliación entre la vida familiar y laboral", recoge el documento, en el que insta al Gobierno a "recuperar la sensibilidad".


Fuentes de la Consejería aludida y en el centro de las críticas incidieron en que se han guiado por la normativa española y aragonesa y han marcado ocho aperturas en los festivos de 2011, el mínimo permitido. Antes de establecer las fechas, aseguraron que se pusieron en contacto con todas las partes implicadas en el comercio, a las que les pidieron que indicaran sus preferencias. De ahí que la orden resultante se haya guiado por "los criterios de la mayoría".


El 23 de abril, al igual que el resto de festivos seleccionados, tienen un inequívoco interés comercial, resaltaron. Apuntaron que atienden a los sindicatos ya que, por ejemplo, no habrá apertura el 1 de mayo. Y mencionaron que los ayuntamientos pueden cambiar hasta dos de las fechas marcadas en rojo en el calendario por la DGA.