OBRAS DEL TRANVÍA

La primera marquesina ilumina el paseo de Los olvidados

Las paradas contarán con paneles en los que se informará del tiempo de espera y de las posibles incidencias que sufran los vehículos. Además, en la zona de las vías se plantará césped y en el techo del panel, un jardín.

La primera parada del tranvía, en el paseo de Los olvidados, durante una de las pruebas de iluminación.
La primera marquesina ilumina el paseo de Los olvidados
DANI MARCOS

Aunque los vecinos de Valdespartera ya han tenido tiempo de observar con detalle la primera marquesina del tranvía, que empezó a colocarse a mitad de julio en el paseo de Los olvidados, ayer se presentó de manera oficial un avance de cómo serán las 19 paradas -16 simples y tres dobles, con acceso a los dos sentidos de circulación- que se colocarán a lo largo de todo el trazado.


Diseñada por Iñaki Alday -responsable de la urbanización del trazado del tranvía-, la marquesina mide 15,40 metros de largo por 2,80 de ancho. Las columnas, que por la noche funcionarán como cajas de luz para iluminar el interior de las marquesinas y que sean reconocibles desde la distancia, miden 2,60 metros de alto.


En la zona central, de contrachapado acabado con poliéster negro, se instalará el sistema de comunicación con el centro de control. Además, en este panel estará integrada la máquina expendedora de billetes -que ha sido diseñada siguiendo los consejos de la ONCE y la Fundación DFA para adaptarla a los usuarios con visión y movilidad reducida-, así como información útil para el usuario y planos de la línea. El resto de avisos, como el tiempo de espera o cualquier contrariedad que afecte a este medio de transporte, se comunicarán a través de un panel de leds y de la megafonía.


También se ha tenido en cuenta la accesibilidad a la hora de entrar al tranvía, ya que los andenes -de 68 metros de longitud, para que en el futuro puedan parar unidades dobles- están elevados para que el vehículo quede a ras de suelo.


En los andenes, así como en puntos concretos del trazado, la zona de la vía estará cubierta de césped -de momento, artificial, aunque plantean que en el futuro sea natural- y sobre las marquesinas se colocará vegetación para que absorba las radiaciones solares y reduzca la temperatura en su interior. Eso sí, tendrán que regar las plantas un poco más, porque de momento el techo de la parada del paseo de Los olvidados, más que un jardín, parece el desierto de los Monegros.