ZARAGOZA

El reloj solar más grande del mundo empieza a cobrar vida en Vadorrey

Los trabajos de instalación del gnomon, el mástil de 30 metros de altura, se iniciaron ayer en el Parque de Oriente.

El reloj solar más grande del mundo empieza a cobrar vida en Vadorrey
El reloj solar más grande del mundo empieza a cobrar vida en Vadorrey
JOSÉ ELÍAS

El gnomon del reloj solar, una pieza de 46 metros de altura que cumple las funciones de 'varilla' de la estructura, ya ha sido transportado hasta el parque de Oriente de Vadorrey, y ayer comenzaron los trabajos de instalación. Las obras, que están siendo coordinadas por el ingeniero responsable del proyecto, Juan Antonio Ros, se prolongaron durante toda la jornada de ayer.

 

Tal y como se recoge en un convenio suscrito con el Ayuntamiento de Zaragoza, Multicaja se hace cargo de todos los gastos de la ejecución e instalación de esta pieza, que va a suponer un foco de atracción destacado en la ciudad.


El reloj solar dispondrá de unos paneles explicativos con sus características y funcionamiento exacto, y además se colocarán otros cuatro relojes, réplicas del original, en diferentes emplazamientos de la ciudad, aunque de momento no hay fecha fijada para ello. Uno de estos pequeños relojes se expuso ya durante las fiestas del Pilar en el Paseo de la Constitución.


El gnomon, financiado y donado por Multicaja, tiene 46 metros de largo, y se elevará algo más de 30 metros sobre el suelo. Está hecho en acero inoxidable y es hueco por dentro.


El reloj exigirá la unión de técnicas y cálculos de extremada precisión. De hecho, se trabaja con la hipótesis de que dé la hora exacta, con un desvío máximo de quince segundos.


Una vez acabado el reloj, se abordará la conversión del entorno en un parque para la ciudad. En el parque proyectado por el ingeniero Juan Antonio Ros habrá zonas verdes, bancos y fuentes, todo ello puesto en relación con el gran reloj de sol. Sobre el parque se señalarán los puntos sobre los que el reloj dará sombra en fechas señaladas, como el Pilar.


Hasta las fuentes serán mini-relojes solares que marcarán la hora con la sombra que proyecte el chorro de agua. Con todo, hace unas semanas Ros destacaba la practicidad del espacio: "Será un lugar ciudadano, el que no quiera saber nada de astronomía, no se enterará".