ZARAGOZA

El alcalde de la Cartuja pedirá responsabilidades por haberse celebrado el concierto neonazi

Contaba con la palabra de Juan Alberto Belloch de que lo impediría.

El alcalde de La Cartuja, José Ramón Gracia, se mostró ayer indignado y a la vez decepcionado por que los neonazis hayan logrado celebrar un año más no solo un concierto sino dos en una nave alquilada en el polígono Empresarium del barrio zaragozano. En la noche del sábado llegaron a juntarse más de cien individuos de esta ideología ultra, procedentes de distintos puntos de España y países como Inglaterra o Italia. La Guardia Civil los controló en todo momento y cerró las entradas y salidas del polígono.


José Ramón aseguró que contaba con la palabra del alcalde de la ciudad, Juan Alberto Belloch, de que cuando comenzara el acto, la Unidad de Apoyo Operativo de la Policía Local (UAPO) entraría y clausuraría la nave por no tener licencia para realizar un evento así. Sobre todo, después de contar con el informe de los Bomberos de Zaragoza que señalaba que el local no era apto para esa actividad. Así me lo dijo también su jefe de gabinete, Carlos García Palacián". Sin embargo, la UAPO se limitó a denunciar por infracción al artículo 48 de la ley de espectáculos del Gobierno de Aragón y luego se marchó.


Después de todos sus esfuerzos para evitar la celebración del concierto y no conseguirlo, José Ramón aseguró que se siente como un "tonto" por creer en la palabra que le dieron y que se va a volver "agnóstico" puesto que es una gran decepción no poder confiar en nadie "por muy alto que sea".


Para el alcalde de CHA, el problema es que estos grupos neonazis son como "una enfermedad" que hay que erradicar". "Pero no se pueden poner parches, ni tampoco trasladar el problema de un barrio a otro o de un pueblo a otro. Primero iban a La Muela, luego a Cuarte, ahora aquí. Lo que hay que hacer es impedírselo en cualquier sitio", manifestó.


En su opinión, no se hace porque las autoridades competentes en esta materia "tienen miedo". "Cuando los ciudadanos nos manifestamos de forma pacífica, como hicimos el sábado centenares de personas, casi te sientes amenazado por la Policía. Sin embargo, los grupos ultras se sienten a sus anchas y hasta dan ruedas de prensa y leen manifiestos", recordó.


El alcalde de La Cartuja añadió que hoy pedirá responsabilidades y explicaciones al Ayuntamiento zaragozano. "No sé qué me dirán. Seguramente saldrán con que fue mejor no disolver el acto para evitar enfrentamientos y que los tuvieron controlados. Pero ya dará igual", subrayó.


Muchos de los neonazis que se desplazaron a Zaragoza el viernes regresaron ayer a su lugares de residencia bien en coche o en avión. El fuerte dispositivo policial evitó que camparan a sus anchas por las calles del centro de Zaragoza y fueron en todo momento seguidos por agentes de antidisturbios a pie y en moto.


No obstante, no se pudo evitar que algunos hicieran pintadas con simbología nazi en algunas calles de Torrero y, en concreto, delante de la casa de un miembro de la coordinadora antifascista.