Las medidas paliativas no acaban con la saturación del centro de salud de La Jota

Las asociaciones vecinales de la margen izquierda piden premura en la redacción del proyecto de construcción del centro de salud del barrio Jesús ya que es “la solución definitiva al problema”.

Centro de salud de la Jota
Hasta cinco días de media en la Jota para obtener cita en el centro de salud
T. M.

Las asociaciones vecinales del barrio Jesús y La Jota se han reunido recientemente ante las medidas paliativas adoptadas por el sector sanitario 1 para ayudar a descongestionar el centro de salud de La Jota, que atiende a los residentes de ambos barrios, y reducir así las demoras en las citaciones. Aunque “toda medida que mejore la situación siempre es bien recibida, somos conscientes de que la solución definitiva al problema solo pasa por la construcción de un centro de salud en el barrio Jesús”, aseguran los presidentes de ambos colectivos, Raúl Gascón y Juan Antonio Andrés.

El centro de salud de La Jota ha decidido incorporar un médico de refuerzo los lunes, jueves y viernes, en horario de 13.00 a 20.00, para aliviar la demanda que soportan el resto de médicos de familia que pasan consulta en estas instalaciones. Andrés indica que se ha detectado que se piden citaciones “con mucha frecuencia” e insiste en que hay que cuidar la medicina preventiva “para evitar enfermedades mayores”, por lo que “no les podemos decir a los vecinos que no soliciten una consulta si lo estiman conveniente”.

Algunos usuarios del centro de salud como N. Bescós y P. Ruberte opinan en la misma línea que el presidente de la asociación de vecinos de La Jota, pero aseguran en más de una ocasión han presenciado cómo pacientes citados no asisten a las consultas, por lo que lanzan una llamada a la concienciación: “Si se tiene alguna dolencia hay que pedir cita tantas veces como haga falta, pero después hay que acudir. Si no, se frena la atención a otros pacientes que pueden estar realmente necesitados”.

La espera actual para visitar al médico de cabecera en La Jota ronda los siete días. Gascón considera que eso podría ser admisible durante periodos vacacionales, en los que no hay menos médicos operativos, o cuando hay que hacer frente a epidemias, “porque se entiende que si todos pedimos cita a la vez tarde en llegar”, pero los vecinos ven “incomprensible” que exista tal demora en periodos estables como el actual.

Andrés subraya que, además, el servicio de rehabilitación “es un desastre, hay gente que lleva más de un año esperando, lo que implica bajas laborales o un elevado gasto económico al tener que recurrir a la privada”. El representante de los vecinos de La Jota señala que, por lo general, “los especialistas tardan mucho en ver a los pacientes”, y eso supone que dolencias que se podrían haber solucionado en “dos consultas” se conviertan en “un año yendo y viniendo al médico de cabecera hasta que te consigue atender el especialista”.

Para ayudar a mejorar la atención en la margen izquierda, Sanidad ha planteado la ampliación de las consultas de especialidades del Grande Covián para evitar los desplazamientos de los vecinos al Royo Villanova e instalar un servicio completo de rehabilitación (para sustituir al actual de La Jota) en la última planta del edificio, algo muy aplaudido por los residentes de los barrios afectados ya que consideran que “el Grande Covián estaba infrautilizado”.

Establecer una solución en firme para el problema del centro de salud de La Jota es una de las principales reivindicaciones del distrito del Rabal, desde que en el año 2005 el Salud asumiera la necesidad de levantar un nuevo centro. En el 2008, Gascón recuerda que “el Gobierno de Aragón pidió la cesión de la parcela situada en la calle de Mas de la Matas al Ayuntamiento de Zaragoza para su futura construcción”, pero desde finales de 2010, y con la memoria funcional redactada, “hemos tenido que esperar hasta los presupuestos del 2018 para ver una partida de 100.000€ para la redacción del proyecto”.

Los vecinos solicitan que la construcción no se demore más tiempo. Para ello, han pedido reunirse con el consejero de Sanidad, Sebastián Celaya, para transmitirle la necesidad de que el proyecto se ponga en marcha lo antes posible. “Si se puede redactar en abril mejor que en junio, con la intención de que en 2019 salga la licitación o que si hay remantes del presupuesto se acelere la construcción”, dice Gascón, quien insiste en que “el centro de salud de La Jota fue diseñado para menos de 20.000 usuarios y en la actualidad soporta más de 37.000”.

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