El Mercado Central empezará a ver desde hoy cómo se levanta el que será su alojamiento provisional. Junto a las Murallas Romanas y la iglesia de San Juan de los Panetes, esta mañana comenzarán los trabajos para instalar la estructura que acogerá desde febrero a 74 puestos de carnes, verduras, pescados o menuceles, entre otras. Son los vendedores que, a lo largo de 2019, estrenarán el ‘nuevo’ Mercado Central, tras la ambiciosa renovación que se ejecutará en el histórico edificio de principios del siglo XX del arquitecto Félix Navarro.

Serán tres meses y medio de obras en los que se instalará una enorme carpa que de efímero tiene poco, ya que nace con vocación de seguir siendo un mercado en el futuro. Eso sí, en un punto de la ciudad aún sin definir, pero seguro que alejado de la ubicación en la que se va a levantar inicialmente. Aunque varios servicios municipales se han pedido la carpa, la idea del gobierno es que siga teniendo el uso para el que se ha diseñado, pero en otro barrio de la ciudad.

Se trata de una estructura en forma de ‘L’ que ocupa buena parte de la calle de las Murallas Romanas –uno de los laterales quedará a pocos metros de los vestigios– y de la plaza que se abre bajo la escalinata de San Juan de los Panetes, a la espalda de la fuente de la Hispanidad.

Son más de 1.500 metros cuadrados de carpa, de una planta, con dos zonas diferenciadas: en el lado más largo, junto a las Murallas, estarán los puestos de carne, pescado, frutas y hortalizas, pollería, charcutería, alimentación varia, menuceles, congelados y hasta un bar.

Se estructurarán en tres filas, dos pegadas a los laterales y una central. La instalación de esta zona del mercado obligará a quitar 24 árboles. Algunos se retirarán para replantarlos, pero otros se perderán, ya que se considera que no es conveniente trasplantarlos dado el mal estado en el que se encuentran. Además, será necesario eliminar o reducir el tamaño de las terrazas del entorno.

El lado corto, en la plaza de San Juan de los Panetes, será más cuadrado y servirá para instalar las cámaras frigoríficas, los vestuarios, los obradores, las oficinas y el muelle de carga y descarga para que los minoristas y los suministradores entreguen el producto. Todos estos trabajos deberían durar tres meses y medio de obras, que fue el plazo que ofertó la empresa que ganó el concurso: las labores las llevará a cabo Ferrovial/Agroman por 1,4 millones de euros, IVA incluido.

Por lo tanto, las instalaciones tendrían que estar listas para finales de febrero del año que viene. Para entonces debería saberse cuáles van a ser los detallistas que ocupan el futuro Mercado Central, que se estrenarán en la carpa provisional. Y entonces habrían de iniciarse también las obras de reforma del edificio de Félix Navarro, que durarán más de un año y que están valoradas en unos 12 millones de euros.

En el borrador de presupuestos que presentó ZEC el pasado viernes se reservan 6 millones para este proyecto. Si se mantienen los plazos, el nuevo Mercado Central estaría listo en el primer semestre de 2019, y entonces se empezaría a desmontar la carpa provisional que se levantará a partir de esta mañana.

Desvíos y cortes desde hoy

Estos trabajos van a suponer que la calle de Salduba, situada detrás de la iglesia de San Juan de los Panetes, se cortará al tráfico desde hoy. También quedará inutilizada la calle de las Murallas Romanas, sobre cuya calzada se instalará la carpa provisional. En la actualidad, estos viales son de uso restringido, es decir, solo para vecinos, taxis, vehículos de carga y descarga... Desde esta mañana solo podrán entrar los usuarios de un garaje privado y los clientes del parquin de la plaza del Pilar.

Además, la avenida de César Augusto cambiará el sentido de la circulación. Es decir, ahora será de entrada desde el paseo de Echegaray y Caballero, en vez de salida. Eso sí, lo será solo para los vehículos autorizados, transporte público y bicicletas. Para salir a Echegaray y Caballero, los conductores deberán circular por la calle de Espoz y Mina. Cuando se retire el mercado provisional, se restituirá la circulación a su sentido habitual.

Durante estos últimos días, los operarios ya han ido haciendo acopio de materiales en la zona para comenzar las obras de inmediato. Además, también se han retirado esculturas como el memorial a Lanuza o la controvertida estatua a las víctimas de violencia de género.