TERUEL

La autovía se puebla de áreas de servicio privadas antes de que Fomento licite las cuatro oficiales

Un establecimiento, en Monreal del Campo, ya está abierto mientras que en Cella y La Puebla de Valverde se construyen otros dos. En proyecto se encuentran los de Ferreruela, Calamocha, Caminreal y entorno de Formiche.

La autovía Mudéjar o A-23 entre Zaragoza y Teruel ha empezado a poblarse de pequeñas áreas de descanso promovidas por empresas particulares que cuentan con el aplauso de aquellos ayuntamientos en cuyos municipios se asientan. Se trata de instalaciones situadas en los principales enlaces del eje. Disponen de una gasolinera como servicio central junto a la que se emplazan una cafetería-restaurante, algunos comercios y, en ocasiones, talleres de reparación.


Una de ellas, la de Monreal del Campo, ya está en servicio desde hace al menos un año. Otras dos, en Cella y La Puebla de Valverde, se encuentran en fase de construcción mientras que otras cuatro, en Ferreruela de Huerva, Calamocha, Caminreal y, otra vez, en La Puebla de Valverde aunque junto a la carretera de acceso a Formiche Alto, en proyecto o estudio.


Estos establecimientos están surgiendo al margen de los planes del Ministerio de Fomento, que ya aprobó en su día, tras la realización del correspondiente estudio informativo y de su exposición al público, cuatro áreas de servicio oficiales a lo largo del tronco principal de la autovía: una entre Sarrión y La Puebla de Valverde, otra en las proximidades de Villarquemado, una tercera en Cuencabuena y una última en Cariñena (Zaragoza).


Acceso directo


A diferencia de las anteriores, estas áreas de servicio oficiales tendrán acceso directo desde la autovía y los usuarios no deberán abandonar esta carretera. Ahora, el siguiente paso que debe dar Fomento es comenzar a expropiar los terrenos necesarios y sacar a concurso la edificación y explotación de las instalaciones, tareas que correrán a cargo de la empresa o empresas concesionarias. Sin embargo, no hay una fecha fija para llevar a cabo esta licitación.


La alcaldesa de La Puebla de Valverde, Marisa Fuertes, en cuyo término municipal habrá dos estaciones de iniciativa privada -una ya está en obras y la otra en proyecto- afirmó sin titubeos que estas iniciativas "son muy buenas para el pueblo porque crearán puestos de trabajo y habrá más gente viviendo aquí". De forma similar opinó el alcalde de Formiche Alto, José Luis Escriche, cuya población también se beneficiará, por proximidad, de una de las instalaciones de La Puebla de Valverde. "Estaremos muy cerca de este área de servicio y algunos trabajadores pueden decidir instalarse en nuestra localidad", dijo Escriche.


En el caso de Cella, según explicó la alcaldesa, María del Carmen Pobo, es un grupo empresarial de Castellón el que está construyendo un área de descanso. Este espacio estará junto a la plataforma logística que promueve el municipio y que ya se planteó antes incluso de que Platea, el polígono industrial de Teruel de última generación, tuviese forma. "El sitio elegido para el área de servicio es muy bueno y aquí tenemos un tráfico ordinario de camiones muy importante que garantiza su rentabilidad", subrayó Pobo.


Para la alcaldesa de Cella, la terminación de la autovía Mudéjar -el último tramo, el que une Calamocha y Romanos, se abrió el pasado mes de febrero- ha supuesto un empujón para las iniciativas empresariales privadas que ya estaban en marcha y que ayudarán a dinamizar el territorio. "Hay, en general, mucho movimiento, porque las infraestructuras contribuyen al desarrollo económico. Ahora, no obstante, hemos de ver el efecto que produce la crisis que atravesamos en el país y que también se está notando", indicó María del Carmen Pobo.


Con optimismo sobre el futuro de la zona habló uno de los concejales de Burbáguena, Javier Lucia. Si bien en este municipio no está prevista ningun área de servicio, la que se va a construir en Ferreruela de Huerva, a muy pocos kilómetros, beneficiará igualmente a esta pequeña localidad del valle del Jiloca.


Calamocha tampoco se va a quedar atrás a la hora de contar con un área de servicio de iniciativa privada, independientemente de que Fomento tenga previsto abrir dos no demasiado lejos de este municipio, una en Villarquemado y otra en Cuencabuena. El pasado martes, representantes municipales se reunieron con empresarios de la localidad para estudiar la mejor forma de acercar a la autovía el próspero comercio de carretera que ha tenido siempre Calamocha, ahora perjudicado, precisamente por la apertura de este eje, que ha dejado sin tráfico el casco urbano.


A solo 50 metros de la autovía se encontrará, si todo llega a buen término, el complejo proyectado en Caminreal. La alcaldesa de este municipio, Nuria Lázaro, destacó que hay "varios empresarios interesados en gestionar una gasolinera". Añadió que similar interés está despertando el polígono industrial, a la misma distancia del eje. "Nos llueven las peticiones para montar empresas", dijo.