El tiempo veraniego que ha reinado este martes en Teruel, donde se han alcanzado 27,6 grados siendo esta la máxima temperatura registrada en los observatorios de Aemet en Aragón hasta las cuatro de la tarde, ha espoleado a los turolenses a salir al campo para celebrar el tradicional Sermón de las Tortillas, una fiesta de origen medieval con la que la población pone fin cada Martes de Pascua a las vacaciones de Semana Santa.

Aunque la población se ha repartido por distintos parajes naturales, el parque de la Fuentecerrada, a cuatro kilómetros de la ciudad y provisto de barbacoas y mesas con bancos, se ha convertido en el punto de reunión de familias y pandillas de amigos que han degustado tortillas y roscas de Pascua y que, con su excursión, han dejado vacío Teruel.

Javier Escriche

Muchos de ellos se han plantado a las siete de la mañana en la Fuentecerrada para no quedarse sin sitio y otros, incluso, han pasado la noche en el paraje dentro del coche con el mismo fin. Es el caso de Álex Junior Giménez, quien confesó que había llegado a tener frío en el interior del vehículo, pero que no le importó. "Así, mis amigos y yo tenemos hoy un buen lugar para pasarlo en grande", ha dicho. Con la mesa llena de bolsas de comida y bebida, el grupo, integrado por una docena de jóvenes, aguardaba impaciente la llegada de la tarde para ponerse a bailar al ritmo de la música electrónica y de reguetón que iba a pinchar otra pandilla asentada a pocos metros y que había traído un gran equipo para mezclar sonidos e incluso un disyóquey, Rafa Rentería, de nombre artístico ‘Dj Hardt’, según ha puntualizado este último.

Javier Escriche

Con este ambiente volcado en la música y el baile, ha convivido en la Fuentecerrada otro más calmado y centrado en la gastronomía y el guiñote. "Nosotros ya vamos bien servidos, hemos almorzado tortilla de patata y jamón y ahora vamos a por la paella", explicó a mediodía Fernando Manrique, rodeado de su familia y de varias neveras portátiles en las que –confesó– se guardaban "de 40 a 50 latas de cerveza". Destacó que el hecho de que la pandemia esté "prácticamente olvidada" es un motivo más "para salir al campo con alegría a disfrutar de la naturaleza".

Mientras sonaba de fondo la archiconocida ‘Una loba como yo no está pa tipos como tu’, varias chicas desenvolvían sus bocadillos. "Nos gusta el lugar porque aquí nos encontramos con gente conocida", ha dicho una de ellas, Paula Pérez. Entre los afortunados en conseguir fogones estaban Vicente Nieto y sus amigos, quienes tenían pensado regresar a Teruel andando desde la Fuentecerrada "para no tener problemas con el coche y el alcohol".

David Domingo, dueño del bar Fuentecerrada, no ocultaba su optimismo por el extraordinario día. "Tengo el comedor completo; este lugar es un punto de referencia en el Sermón de las Tortillas", afirmó. La jornada terminó con una suelta de vaquillas enfundadas en la plaza de toros de Teruel a la que han asistido 2.600 personas y en la que ha habido que lamentar un herido, aunque no de gravedad. El lesionado ha sido un joven que ha sufrido una cogida en un quiebro a un astado y se ha lastimado la nariz y la espalda, siendo trasladado por ello al hospital Obispo Polanco.