El corte de la carretera N-420 en Utrillas por el Ministerio de Transportes desde el pasado día 7 para reparar un muro de contención de la calzada que se derrumbó genera malestar entre los vecinos de la localidad y de la comarca, que tienen que dar un largo rodeo para llegar a la cabecera comarcal por carreteras secundarias.

El cierre de la calzada motiva también algunos problemas con vehículos de gran tonelaje que por desinformación o por despiste se tropiezan con el corte, a las afueras de Utrillas, y tienen que invertir el sentido de la marcha discurriendo por las calles de la localidad.

Los alcaldes de Utrillas y de otras siete localidades de las Cuencas Mineras y el Jiloca han solicitado una reunión con el subdelegado del Gobierno, José Ramón Morro, para conocer las previsiones de duración del corte y para pedir también una mejora de la señalización que evite que algunos vehículos se tropiecen con el cierre de la calzada.

El alcalde de Utrilas, Joaquín Moreno, ha solicitado también una reunión con el director general de Carreteras para “saber cómo van los trabajos de reparación de la carretera y que plazo hay para la reapertura al tráfico, porque se acercan unas fechas complicadas con las Navidades”.

El cierre de la N-420 en el kilómetro 654,4 para reparar el muro de contención de la calzada alarga el viaje entre Utrillas y el cruce con la N-211, una de sus principales vías de acceso, de los tres kilómetros habituales hasta 30 al desviar el tráfico por la ruta Escucha-Palomar-Castel de Cabra-Montalbán.

Joaquín Moreno señala que la N-420 “no es una carretera comarcal, sino la arteria principal de la provincia, y sirve para llegar a los servicios comarcales que están en Utrillas y a los centros de trabajo de la localidad”. Moreno añade que el corte tiene una duración indeterminada, pero los vecinos quieren saber qué previsiones de reapertura hay para “organizarse”.

El alcalde reconoce que, entre los vecinos, hay malestar por la falta de información sobre el fin del corte de la carretera y por las molestias que conlleva al rodeo alternativo. Confirma que, aunque la señalización es suficiente, se producen incidencias por camiones que llegan hasta la barrera que cierra el paso y “luego tienen que maniobrar en la travesía, lo que es complicado”.

Para evitar a los servicios de emergencias el largo rodeo impuesto por el corte de la carretera nacional, el Ayuntamiento y el servicio de bomberos de la DPT han habilitado un acceso provisional a través de una antigua pista.

José Ramón Morro ha confirmado que se reunirá la próxima semana con los alcaldes para explicar la marcha de las obras y fijar “un marco temporal” para su ejecución, además de mostrarse dispuesto a reforzar la señalización.