El Ayuntamiento de Teruel ha dado el visto bueno al proyecto de mejora y acondicionamiento de la Cuesta de los Gitanos en la comisión de Infraestructuras celebrada el pasado miércoles, lo que supone un paso previo a su aprobación en el próximo pleno. Se trata de las obras de mejora de esta vía que conecta el barrio del Ensanche con la N-234 y la TE-V-6014 con dirección a Villaspesa. Actualmente, los vehículos encuentran pavimento de hormigón, curvas sinuosas y una pendiente media del 12%, muy cerca del máximo, que es 14%.

Una vez adjudicados los trabajos, el plazo de ejecución es de seis meses y el presupuesto de licitación asciende a cerca de 694.000 euros. La alcaldesa de Teruel, Emma Buj, ha considerado que "es una buena noticia para todos los turolenses que viven en el Ensanche y ha supuesto un gran esfuerzo en tiempo y trabajo por las circunstancias de la obra". “Hoy ya tenemos el proyecto, estamos a punto de firmar las actas de expropiaciones y en los próximos meses vamos a licitar la obra para tener esta vía tan concurrida en las condiciones que todos queremos”, ha añadido al recordar que esta zona del Polígono Sur se va completando "por fin".

El proyecto contempla la demolición de tapias y casetas afectadas, la excavación de la plataforma y de la cimentación del muro que delimita el ensanche de la calzada en un tramo del trazado. Además, se ejecutarán muros de mampostería para contener la tierra de los taludes y el agua de escorrentía. Durante las obras se espera realizar una canalización para facilitar el despliegue de redes públicas de comunicaciones electrónicas.

Diseño del proyecto

El esquema de la nueva vía señala que contará con nueve metros de anchura para acoger una calzada de doble carril con tres metros cada uno, carril bici de subida de un metro en la margen derecha, mientras que el de bajada será el mismo carril que para vehículos motorizados, ya que en el lado izquierdo del trazado se construirá una acera de dos metros con bordillos prefabricados de hormigón. Además, durante la ejecución de la obra se plantarán árboles en distintos puntos de ese tramo.

Dado que Adif ha ejecutado el nuevo paso bajo la vía del tren, este proyecto acondicionará ese espacio dando continuidad a la rasante proyectada por su interior. La obra se completa con la ejecución de una nueva red de distribución de agua potable para la zona del Polígono Residencial Sur. A esto le acompañará el alumbrado del nuevo vial con 15 nuevos puntos de luz.

Drenaje de aguas

El drenaje superficial aguas arriba del paso del ferrocarril se resuelve canalizando las aguas de la plataforma del nuevo camino, que conectarán con la red de pluviales existente y unas arquetas antes del cruce bajo el tren. Bajo la obra de Adif el desagüe se realiza a través de tres tubos, que conectarán con la red existente y desagua en la acequia de la carretera de Villaspesa.

Además, el proyecto contempla la señalización horizontal y vertical, barreras de seguridad, quedando definida la zona de enlace con la actual zona de aparcamiento del Polígono Sur mediante una reordenación del tráfico materializada con pintura y señalización vertical.

Por último, se ampliará el encauzamiento de la acequia de riego que discurre junto al vivero y el punto de desagüe a la acequia de Argentera se reforzará con la colocación de escollera. Las tapias demolidas se reconstruirán mediante un muro de hormigón y se recolocarán las puertas existentes.