Un deslizamiento del terreno corta el carril de acceso a la A-23 en el cruce de Fuentecerrada, en Teruel
El Ministerio de Transportes achaca a las lluvias el agrietamiento de la calzada y estudia cómo repararlo.
Un carril de la carretera Nacional 234 (Sagunto-Burgos) a su paso por la capital turolense permanece cortado a la altura del cruce de entrada al parque de la Fuentecerrada debido a la aparición de profundas grietas y blandones en la calzada. La vía registra a diario un tráfico intenso tanto de turismos como de vehículos pesados por ser una de las conexiones con la autovía Mudéjar o A-23 desde Teruel en dirección a Valencia.
El corte se produjo hace más de un mes y desde entonces un semáforo provisional regula el tráfico dando paso alternativo a los vehículos que llegan de una y otra dirección por el carril que no está afectado. Los desperfectos se sitúan en uno de los extremos del puente –el más próximo a la ciudad– que salva la rambla de la Fuentecerrada.
Desde el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) explican que el agrietamiento de la calzada se debe a un deslizamiento de un terraplén causado por las intensas lluvias caídas en la zona el pasado mes de marzo.
De hecho, según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), en el último trimestre y especialmente en el mes de marzo, la capital turolense registró un aumento de las precipitaciones con cifras de lluvia acumulada que multiplican por cinco la media histórica. También abril estuvo muy por encima de lo normal, duplicando los registros habituales.
Fuentes oficiales del Mitma señalaron que se están realizando los estudios técnicos necesarios "para definir y valorar" las actuaciones que habrá que llevar a cabo para reparar el tramo afectado, de unos cincuenta metros de longitud. Las mismas fuentes no pudieron concretar el plazo de tiempo que será preciso para solucionar el problema y normalizar el tráfico en este punto.
Además de constituir la salida hacia la autovía Mudéjar en dirección a Valencia, la N-234 enlaza en ese punto con el acceso al parque de La Fuentecerrada, una zona natural a unos cuatro kilómetros del casco urbano que sirve de esparcimiento a la población de Teruel. Ello hace que el tráfico aumente notablemente por las tardes, cuando muchos ciudadanos, al acabar de trabajar, se dirigen hacia ese espacio verde para hacer deporte o disfrutar del paisaje.
