Máquinas de asedio en el interior de la muralla medieval

Una exposición permitirá ver por primera vez hasta el 8 de noviembre el recinto amurallado de Teruel, un espacio restaurado hace seis año, pero nunca abierto.

En la muestra se pueden ver máquinas de asedio a escala real.
En la muestra se pueden ver máquinas de asedio a escala real.
antonio garcía/bykofoto

La muralla de Teruel ha abierto por primera vez sus puertas al público con motivo de la exposición ‘Ciudades bajo asedio’, una muestra que permitirá recorrer el interior de una parte del recinto fortificado y divisar desde una insólita perspectiva la traída de agua de la ciudad a través del acueducto de los Arcos.


La exposición, a la que se podrá acceder de forma gratuita hasta el día 8 de noviembre, está integrada por piezas arqueológicas, miniaturas, grabados, manuscritos y maquetas de grandes máquinas de asedio, así como un armero medieval. Con estos objetos se pretende ilustrar la influencia de los asedios sobre la población civil a lo largo de la historia y, en especial, algunos de los episodios bélicos que padeció la ciudad de Teruel.


Coordinada por el historiador turolense Rubén Sáez y con la colaboración financiera del Ministerio de Defensa, la actividad cultural constituirá una oportunidad única para conocer el interior de la muralla, un espacio museístico contiguo a la Puerta de la Traición, restaurado hace seis años, pero nunca hasta ahora abierto por falta de financiación.


Rubén Sáez señaló que los sitios han marcado la vida de muchas ciudades, entre ellas Teruel, que sufrió tres de estos asedios: en el siglo XIV, durante la Guerra de los Dos Pedros que enfrentó a Aragón y Castilla; en las guerras Carlistas y en la Guerra Civil. En la muestra se ofrece una visión de los padecimientos experimentados por las poblaciones civiles, como lo demuestran los gigantescos proyectiles de catapulta, algunos de cien kilos de peso, encontrados en las excavaciones arqueológicas que se llevaron a cabo en la muralla, y cuyo objetivo era causar bajas entre los habitantes de Teruel.


Con las reproducciones de máquinas de guerra, algunas a tamaño real, que se exhiben en las diferentes estancias, se puede apreciar la capacidad inventiva del hombre a través de los siglos para idear los ingenios bélicos más destructivos.


La teniente de alcalde del Ayuntamiento turolense, Emma Buj, señaló que esta actividad es solo "un aperitivo" de los planes de la Corporación. En estos momentos se está trabajando en el pliego de condiciones para poder adjudicar conjuntamente con los aljibes de la plaza del Torico la gestión del Museo de la Muralla. Será el primer paso de un proyecto de más envergadura que contempla la musealización del recinto amurallado con máquinas de asedio.


El subdelegado de Defensa en Teruel, Miguel Juliá, considera que la muestra permitirá visualizar "la evolución del arte militar".

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