Blog La voz de mi amo

por Matías Uribe

NUEVA NORMATIVA

Terrazas para contrarrestar la ley antitabaco

Las solicitudes para instalar veladores en las calles, que ahora tienden a cerrarse, han aumentado cerca de un 15% el último añoZaragoza no regula la estética ni la seguridad de las estufas por ser "un fenómeno nuevo".

El Café de Levante, El Boticario o el San Siro (en la foto) ofertan hace tiempo terrazas climatizadas.
Terrazas para contrarrestar la ley antitabaco
CARLOS MONCÍN

Hasta un 15% han aumentado en Zaragoza las solicitudes para instalar terrazas que, a partir del próximo 2 de enero y debidamente climatizadas, tienen visos de convertirse en la gran alternativa de los bares para contrarrestar la ley antitabaco. Ni en bares, ni en restaurantes, ni siquiera en celebraciones como bodas o bautizos podrá fumarse en virtud de la nueva ley de Espacios Públicos Libres de Humo que, sin embargo, sí hará una excepción con los casinos y las salas de juego.

"Hace días enviamos a nuestros socios una circular que aconseja que no se haga inversión o adquisición de ningún tipo hasta que no se concrete la ley", comentaba ayer Jorge Bernués, de la Asociación de Cafés y Bares, explicando que con la actual incertidumbre es preferible no actuar. En Zaragoza hay poco más de un millar de terrazas permanentes que, en los últimos meses y para alegría de las empresas del sector de los toldos, se han ido poblando de cristaleras, cerramientos de aluminio y estufas eléctricas, de butano o de infrarrojos.

Dudas con las estufas

Fuentes municipales afirman que "al tratarse de un fenómeno nuevo, estas estufas todavía no cuentan con una regulación específica, pero deberá tenerla en algún momento, sobre todo por temas de seguridad y estéticos". De hecho, Francisco José Montaner, presidente de la Asociación de Usuarios de Veladores, advierte de que estas 'antorchas' estarían prohibidas porque "el permiso de terraza se circunscribe exclusivamente a la mesa y las cuatro sillas. Todo el resto son 'añadidos' que no contemplan las normativas, por lo que no se podría instalar una estufa o, incluso, el cartel de los helados, aunque la administración no acostumbra a poner trabas". En Cafés y Bares, por su parte, interpretan que "como no alcanzan una potencia determinada, las estufas no precisan de una licencia municipal", aunque sí habrían de regularse por las normas de instalaciones de gas, lo que eliminaría todas las que tienen forma de seta y funcionan con una bombona de butano.

Promoción puerta a puerta

Pero, ¿qué dice la ley antitabaco sobre los cerramientos y los toldos? Se permite fumar al aire libre y en espacios cubiertos con un máximo de dos paredes y un techo. El margen de maniobra para 'amueblar' una terraza es amplio porque la mayoría de los cerramientos actuales son versátiles e incluyen mamparas con raíles, paravientos desplegables, lonas enrrollables...

Francisco Javier Lapuente, director comercial de Toldos Serrano, reconoce que estos últimos días de mes están siendo "la locura". "Estamos moviendo el catálogo por el sector de la hostelería y, prácticamente, hemos ido llamando puerta por puerta". Aunque la nueva ley antitabaco lleva dos años gestándose, "fue a partir del pasado martes -cuando no prosperó la enmienda que proponían habilitar 'peceras' para fumadores de un 30% de la superficie- cuando los clientes sí se decidieron a preguntar por los productos de cerramientos".

El Ayuntamiento explica que el número de veladores se arregla a la anchura de la calle y que la Policía Local calcula el espacio disponible antes de dar la autorización. Montaner recuerda que hay que pedir un permiso para la terraza y otro diferente para instalar toldos y cerramientos. Además, indica que el aumento de solicitudes se debe también a que la ciudad se expande en nuevos barrios y a que, en el centro, por ejemplo en Gran Vía, se han ampliado las aceras.

Tanto en el caso de las terrazas como de los toldos, las calles y los precios se dividen en cuatro categorías: un velador en Independencia (60 euros/año) es cuatro veces más caro que uno en el barrio Oliver (21 euros/año), y cada poste de cerramiento cuesta entre 50 y 70 euros (aunque ahora se estudia cobrar por superficie). Estas inversiones se antojan como un "mal menor" con tal de no perder clientela: "El problema es que hay mucho café acompañando al cigarro, y si renuncias a diez cafés al día, por los 3.500 locales de Zaragoza y los 200.000 de toda España, imagina lo que se puede perder...", se quejan los hosteleros.