TRAVESÍA CENTRAL PIRENAICA

La UE ve "necesaria" la Travesía, pero dice que no habrá trazado hasta 2020

El coordinador de la Red Transeuropea apunta que la obra requerirá hasta casi 20 años adicionales. El comisario de Transportes pide nuevas fórmulas de financiación porque los fondos públicos son "insuficientes".

El coordinador de la Red Transeuropea, Secchi (dcha.), junto al ministro Blanco, ayer en la cumbre.
La UE ve "necesaria" la Travesía, pero dice que no habrá trazado hasta 2020
P. ETURA / APG

La Travesía Central Pirenaica (TCP) sigue siendo una prioridad para Europa, pero sus plazos se alargan 'sine die' sin haber empezado siquiera los proyectos y la grave crisis económica pone en tela de juicio su financiación a corto y medio plazo. Hasta el coordinador europeo para los proyectos transfronterizos entre España, Francia y Portugal, el italiano Carlo Secchi, aseguró ayer que la TCP será "necesaria" para permeabilizar los Pirineos, pero advirtió que no tendrá proyecto antes de 2020. En una entrevista con HERALDO, Carlo Secchi echó por tierra la planificación oficial, que fija para ese año la conclusión del corredor de mercancías, ya que para entonces habrá que licitar unas obras que tardarán "entre 10 y 20 años" en función de su diseño.


No dejó lugar a la duda. "No se puede esperar un milagro. Los grandes proyectos de los Alpes necesitaron muchísimos años para su preparación y aquí no solo hay que construir un túnel de 40 kilómetros, sino conectarlo con la red española y francesa", resaltó.


Al igual que el resto de altos representantes europeos que participan en Zaragoza en la cumbre sobre Redes Transeuropeas, se refirió a la grave crisis al apuntar que los plazos, además, "dependen mucho de la situación económica". Y añadió: "Nosotros somos moderadamente optimistas, pero existe el riesgo de que los gobiernos reduzcan el gasto público posponiendo decisiones. Y aplazar inversiones en infraestructuras es más fácil que hacerlo en otras materias".


Secchi subrayó que el valor de grandes proyectos como la Travesía Central no es la creación de empleo durante las obras, sino la mayor competitividad y el "relanzamiento económico" que generan.


En la inauguración de la cumbre, el comisario europeo de Transportes, Siim Kallas, incidió en que hace falta un "esfuerzo presupuestario considerable" para avanzar más en la Red Transeuropea de Transportes, en la que se incluye la Travesía, pero reconoció que la financiación pública es "insuficiente y no tan eficiente como sería necesario". Por ello, pidió "fórmulas innovadoras" que ayuden a sufragar este red, especialmente en lo concerniente a pasos transfronterizos.


Kallas apuntó la posibilidad de profundizar en la participación público-privada en grandes infraestructuras (como se ha hecho en el caso del túnel de alta velocidad de Le Perthus), recurriendo a la tasación de los costes externos.


En este sentido, Carlo Secchi indicó que el ahorro de CO2 que aportará la Travesía Central al suprimir tráfico de camiones podría venderse a empresas contaminantes, como acererías o centrales térmicas, para complementar los ingresos que generara la explotación del corredor. "El problema de la participación público privada es la rentabilidad y, sin ser revolucionarios, se puede lograr avances mediante la venta en el mercado del ahorro de CO2. Pero para ello se necesita un reglamento adecuado para la internalización de los costes externos", explicó.


Revés al corredor mediterráneo


El coordinador europeo también descartó que el corredor mediterráneo que propugna el 'lobby' Ferrmed y respalda el Ministerio de Fomento sea un nuevo eje de mercancías a integrar en la red transeuropea. "No es un proyecto nuevo, sino una integración de varios y que plantea mejoras de las líneas existentes. Es más bien una visión estratégica al plantear un estándar muy avanzado en las comunicaciones ferroviarias", sentenció.


La postura mantenida por Secchi estuvo en la línea de los acuerdos alcanzados en la cumbre informal, que marginó dicho proyecto al no estar incluido ni en los documentos preparatorios para la revisión, presentados por la Comisión en la reunión de Zaragoza para su debate y aprobación dentro de un año.


La TCP, sin avances en la cumbre


Tampoco se ha producido el más mínimo avance en la Travesía Central Pirenaica (TCP). Carlo Secchi negó que el proyecto requiera siquiera un coordinador tras la retirada hace un año de Ettiene D'avignon, pese a que se daba por hecho su nombramiento (ahora es coordinador de los proyectos de interoperabilidad de redes en la Península y de los pasos de alta velocidad vasco y catalán). "No tiene porque está en una fase de estudios preliminares. Hay nueve coordinadores para diez de los 30 proyectos transeuropeos porque tienen problemas concretos y se deben buscar soluciones", dijo.


Las decisiones en la cumbre se centraron, sin embargo, en el nombramiento de tres nuevos coordinadores para los ejes Atenas-Nuremberg y Dresde, París-Bratislava, Berlín-Palermo y a la firma de tres "memorándum" para impulsar otros tantos proyectos de comunicación con los que se evidenció las prioridades reales de la UE.


Uno de ellos afecta precisamente a los actuales corredores de alta velocidad entre España y Francia (los del País Vasco y Cataluña, incluidos en el denominado eje 3 de la Red), al Lyon-Budapest-Ucrania y al ferrocarril de los países bálticos. "Al firmar estos importantes documentos demostramos nuestro compromiso actual con estos proyectos cruciales de la Red Transeuropea que van de los países bálticos a la península Ibérica", sentenció el comisario de Transportes y vicepresidente de la Comisión.