El Ayuntamiento de Huesca ha dado un nuevo paso adelante para completar la reurbanización del Coso Alto, en el tramo comprendido entre la plaza de la Inmaculada y la calle Amistad. Un proyecto que quedó pendiente dentro del ambicioso plan de peatonalización que impulsó el PP entre 2011 y 2015 y que se paralizó con la llegada del PSOE al gobierno municipal ya que priorizó otras inversiones como la remodelación del paseo Ramón y Cajal.

El proyecto ha salido a exposición pública durante 15 días para que se puedan presentar alegaciones. Una vez superado este período, las obras saldrán a licitación con un precio base de 1.937.322,13 euros (IVA incluido). El presupuesto de 2023 ya reservó una partida de 500.000 euros.

Según informaron este martes desde el equipo de gobierno del PP, su objetivo es ir terminando con la urbanización en plataforma única eliminando las aceras de todas esas calles que, en su momento, pasaron a formar parte de la zona peatonal. Está previsto que las obras comiencen después de las fiestas de San Lorenzo para no ocasionar molestias a los viandantes. El plazo de ejecución serán de 32 semanas, es decir, unos siete meses.

En paralelo, los populares quieren avanzar los trámites para reurbanizar a lo largo de esta legislatura las calles Zaragoza y Alcoraz y la plaza de Navarra, en pleno corazón comercial de la ciudad, que sigue peatonalizado a medias ya que solo se colocaron maceteros para restringir el tráfico.

El proyecto más adelantado es el de la calle Zaragoza, en el tramo desde Cavia/Cabestany hasta la plaza de Navarra, cuya redacción fue adjudicada a finales de año al arquitecto Sixto Marín con un plazo de tres meses y un coste de 12.500 euros.

El PP pretende que estas calles y plazas tengan una plataforma única siguiendo el "estilo" de urbanización de los Porches o el Coso para homogeneizar la imagen del centro y potenciarlo de cara al comercio y al turismo.