Ha fallecido Alfredo Cajal, que ejerció altas responsabilidades en el Partido Aragonés y el Gobierno de Aragón. El funeral tendrá lugar este sábado a las 17.00 en la iglesia parroquial de Santa Ana de Alcubierre.

Nació en Alcubierre el 26 de abril de 1947. Estaba casado y tenía un hijo. Era licenciado en Veterinaria por la Universidad de Zaragoza. Se especializó en diversas materias de su profesión, fundamentalmente relacionadas con la reproducción animal y trabajó en el Cuerpo facultativo técnico superior de Administración Sanitaria Veterinaria del Ejecutivo autonómico, en Sariñena, de cuya Oficina Comarcal Agroambiental (OCA) fue coordinador. Entre otras actividades sociales, fue director técnico y presidente del Comité Organizador de la Feria de Los Monegros (Femoga)  durante diez años.

En el ámbito institucional y político, era militante del PAR desde 1989. Fue concejal del Ayuntamiento de Sariñena y diputado provincial por el Partido Aragonés, desde 1991 a 1999. Entre 1995 y 1999 fue portavoz del grupo y dirigió el área de Desarrollo y Medio Ambiente de la Diputación de Huesca. 

En diciembre de 2002 fue nombrado director del Instituto Aragonés del Agua(IAA), cargo que desempeñó hasta 2007. En este periodo se alcanzaron los grandes acuerdos de la Comisión del Agua de Aragón, con la actualización y solución de conflictos en torno a grandes piezas del Pacto del Agua. Cajal tuvo un protagonismo directo en este proceso. 

Posteriormente, entre 2007 y 2011, fue director general de Ordenación del Territorio del Gobierno de Aragón y en 2012 volvió a la dirección del IAA, donde estuvo hasta 2015, año en el que se jubiló. 

Desde el Partido Aragonés se destaca la enorme pasión por Aragón y por los Monegros de Alfredo Cajal, que canalizó a través de una firme vocación de servicio público, tanto en su profesión de veterinario, como en su desempeño político en el PAR y en las instituciones aragonesas. 

Ese mismo sentimiento aragonés, sus raíces y su trabajo le llevaron a poner el agua y las personas en el centro de su tarea, en todo momento con claridad de ideas y capacidad, como recuerdan todos los que compartieron esa labor. "Su carácter rotundo y cercano han merecido, durante todos estos años, el enorme aprecio personal de compañeros y rivales políticos", señalan desde el partido.