Con globos rojos y un gran corazón. Así se han concentrado este 14 de febrero, día de los enamorados, las asociaciones patrimonialistas Apudepa, Valle de la Gloria y la Plataforma para la Defensa del Patrimonio de Huesca para expresar su "amor por el patrimonio" y pedir al Gobierno de Aragón que sea visitable la Cueva de Chaves "en el plazo más breve posible".

Estos colectivos han registrado en la Delegación Territorial de la DGA en Huesca un escrito dirigido a la Dirección General de Patrimonio para reclamar que tome las medidas necesarias para que el conjunto arqueológico de la Cueva de Chaves y los tres abrigos rupestres de Solencio I, II y III, declarado Patrimonio de la Humanidad y Bien de Interés Cultural, situado en el pueblo de Bastarás (Casbas de Huesca), estén protegidos y puedan ser visitados por los ciudadanos interesados.

Recuerdan que corresponde al Departamento de Cultura otorgar la autorización para que este conjunto arqueológico protegido pueda ser estudiado, visitado, conocido y valorado, "especialmente cuando, siete años más tarde, la sentencia firme dictada por el Juzgado de Instrucción de lo Penal nº 1 de Huesca, el 9 de noviembre del 2016, aún no se ha ejecutado".

Denuncian que este patrimonio sigue "paradójicamente" en manos del empresario leonés Victorino Alonso y la empresa Fimbas, que fueron condenados por un delito contra el patrimonio histórico, por la destrucción de la cueva de Chaves.

Además, estas asociaciones defensoras del patrimonio cultural y natural han solicitado una cita para entrevistarse con el responsable del área de  Patrimonio Cultural en Huesca del Gobierno de Aragón.

A principios de enero, también entregaron una simbólica 'carta a los Reyes' en el Palacio de Justicia de Huesca pidiendo como deseo que se haga cumplir la sentencia condenatoria a Victorino Alonso y se inicie la recuperación de la Cueva de Chaves para disfrute de todos los ciudadanos. 

Reclaman al Juzgado de lo Penal número 1 de Huesca que reconozca en 12,6 millones de euros el valor de la finca donde está este yacimiento neolítico y se proceda a su inmediata entrega al Gobierno de Aragón como parte de la deuda que mantiene Victorino Alonso y su empresa Fimbas como responsable civil subsidiaria.