Las tractoradas se cuelan en la cabalgata de Huesca

El carnaval es transgresión y protesta, además de fantasía. Lo ha demostrado este año la cabalgata de Huesca, protagonizada de nuevo por los colegios, que han vuelto a dar el do de pecho en un alarde de originalidad, pero que se ha cerrado con las reivindicaciones de agricultores y peñistas. 

El desfile, que ha partido a las 18.00 de la avenida Monreal, ha batido un récord de participación con 24 grupos y casi 4.500 inscritos en el concurso que elegirá las comparsas mejor ataviadas, más originales o más numerosas. Fuera de competición, han paseado su protesta por el Coso varias decenas de agricultores llegados desde distintos pueblos con sus familias, todos con los chalecos amarillos, bajo consignas como 'La agricultura no se vende, se defiende' o 'Por el futuro del campo'.

Encabezaba la comitiva un grupo de niños conduciendo sus tractores de juguete. Álvaro, llegado de Argavieso, ha explicado que la decisión de salir en el carnaval de Huesca ha sido tan espontánea como las tractoradas de esta semana. "De hecho, nos hemos citado por el grupo que tenemos de wasap para quedar en Huesca y hemos venido de varios pueblos", ha contado. 

Las fotos del carnaval de Huesca

Por último, cerraba la cabalgata la peña Alegría Laurentina, que al grito de "No somos camareros, somos peñistas" ha reivindicado la reapertura de su local, el salón Jai Alai, cerrado en octubre por el Ayuntamiento, que les exige la licencia de actividad de la ordenanza de hostelería mientras ellos defienden su condición de local de ocio sin ánimo de lucro. Han ido vestidos de blanco y verde, trasladando al carnaval los colores de las fiestas de San Lorenzo. 

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Pero antes de que concluyera la cabalgata, el público ha podido asistir a una marea humana plagada de fantasía e imaginación de la mano de los colegios y las amypas de Huesca. Padres y niños son los auténticos protagonistas del desfile en los últimos años. No han faltado las carrozas, ni la música, con charangas y grupos de batucada. 

La comparsa del centro bilingüe San Vicente se ha disfrazado de Wally invitando a encontrar al famoso personaje; la del Alcoraz ha viajado a la Edad Media; Salesianos se ha vestido con bata de pintor y ha cogido las paletas; San Viator se ha sumergido en un bosque mágico lleno de flores y personajes mitológicos; o el Pedro J. Rubio, con nada menos que 846 participantes, se ha inspirado en el personaje de Frankenstein. Y el colegio Pirineos-Pyrénées se ha anticipado a las Olimpiadas de París 2024, con Torre Eiffel incluida.  

Las familias del Parque han hecho un guiño a los Beatles con 'El Parque Submarine', Santa Rosa ha traído un cortejo de pavos reales, Santa Ana ha recordado el Día de los Muertos de la cultura mexicana bajo el título 'Coco', el Sancho Ramírez ha vestido vistosas plumas de colores  y el Juan XXIII ha celebrado los 100 años de la radio en España.  

"Hace un mes y medio que empezamos a trabajar en el disfraz", decía vestida con un colorido atuendo plagado de pétalos Nati Iglesias, una de las integrantes de la numerosa comparsa de San Viator. "Hemos querido reproducir un jardín mágico, con libélulas, orcos, hadas, flores...". 

Junto a las amypas, clubes parroquiales, peñas recreativas y ludotecas, que han recreado la película 'Ratatouille', los autos locos, los cubos de Rubik o los autos de choque. No ha faltado la comparsa de Cadis, dedicada al tiempo, con atuendos de relojes. Ni grupos llegados de pueblos cercanos, como una veintena de vecinos de Angüés, los 'Angüesitos', disfrazados de huesitos. "Es el segundo año que venimos al carnaval de Huesca", ha explicado una de sus integrantes, María José Puyuelo, que desfilaba bajo el cartel de 'El lamín de lo rural'. 

Y no ha sido el único grupo de fuera. Junto a las amyps de la capital oscense ha paseado por el Coso la del colegio de Tardienta. Bajo el título 'El tiempo está revuelto', han desfilado padres y niños disfrazados de copos de nieve, arco iris, soles, rayos o nubes. Los ha acompañado, como no podía ser de otra manera, la famosa charanga de Tardienta. Y curiosamente han sido el último grupo del concurso, que antecedía a la protesta de los agricultores, para quienes el tiempo también está revuelto.