La Subdelegación del Gobierno en Huesca está estudiando junto con el Ministerio de Inclusión y con el Instituto Aragonés de Empleo (Inaem) si existe "alguna excepción" en la normativa que permitiera acelerar la integración laboral de los 200 migrantes trasladados la semana pasada desde Canarias a la provincia. Todos ellos siguen alojados provisionalmente en el antiguo Hotel Montearagón de Quicena, a pocos kilómetros de la capital oscense, y en el albergue de Pirenarium de Sabiñánigo. 

José Carlos Campo, subdelegado del Gobierno, ha agradecido la propuesta que le ha hecho llegar oficialmente este lunes CEOE-Cepyme Huesca, que plantean formar a estos migrantes para poder contratarlos en empresas altoaragonesas para cubrir el déficit de mano de obra que padecen muchos sectores, sobre todo de personal no cualificado. También ha valorado los ofrecimientos que les han hecho otras organizaciones, ayuntamientos, comarcas y el Gobierno de Aragón.

Ha explicado que antes de poder concretar cualquier solución, tienen que hacer una valoración individual de todas las personas que han llegado "porque no todas vienen en la misma situación". Tras ello, decidirán si se puede atender la propuesta de la CEOE aunque, a priori, existen dificultades legales ya que, por ejemplo, el arraigo por formación es para migrantes que lleven ya dos años en España aunque los solicitante de asilo pueden trabajar ya a los seis meses. Por ello, ha insistido en que "aún es pronto" para saber qué se podrá hacer.

"No ha habido ningún incidente hasta ahora"

Campo ha resaltado que están en "permanente contacto" con los ayuntamientos de las localidades donde han sido alojados además de con la asociación Apip-Acam que está a su cargo. "De momento solo dan paseos esperando a ver qué se hace con ellos y hasta ahora no ha habido ningún incidente", ha dejado claro. Su tiempo de permanencia suele ser de entre 15 días y un mes, aunque se puede alargar dependiendo de su situación personal. 

Por último, el subdelegado del Gobierno en Huesca ha negado que hubiera descoordinación con la DGA en el momento del traslado de estos migrantes. "Se ocupa el Ministerio con las entidades que los acogen y hubo una anticipación de la llegada dada la situación insostenible que hay en Canarias, pero las cosas se solucionan día a día", ha dicho en respuesta a las críticas del Ejecutivo autonómico de la semana pasada.