Accidentado puente del Pilar en la montaña con una docena de rescates
Dos senderistas pasaron la noche en el pico Anayet en medio de fuertes lluvias, cinco requirieron el auxilio de la Guardia Civil por lesiones de tobillo y una montañera tuvo que ser evacuada con un ataque de ansiedad.
El puente del Pilar se ha cerrado en Aragón con una docena de rescates en la montaña, la mayoría en el Pirineo. Dos de los más graves se produjeron el jueves en Torla, con una escaladora de Vitoria y una senderista de Zaragoza heridas por sendas caídas. Ese mismo día 12 de octubre la Guardia Civil auxilió a un escalador en la cresta de Embid, en la provincia de Zaragoza, y a una barranquista en Biescas. Y a estos sucesos hay que sumar ocho salvamentos más entre el viernes y el domingo.
La jornada más accidentada fue la del viernes, con cuatro rescates. Los equipos del Greim de la Guardia Civil tuvieron que socorrer a dos montañeros en las proximidades del pico Russel (Benasque). Uno de ellos tropezó y en la caída se produjo un corte profundo en la rodilla. El hombre, de 44 años y vecino de Gerona, fue evacuado al Hospital de Barbastro.
Ese mismo día, los agentes auxiliaron a dos escaladores en apuros, una mujer de 24 años de nacionalidad polaca y un noruego de 55. Se encontraban realizando una vía en el Mallo de Frechín, en las Peñas de Riglos, y una vez finalizada intentaron abandonar la pared pero después de varias horas no encontraron la salida. El helicóptero los sacó ilesos.
En los otros dos rescates del viernes se evacuó a un escalador zaragozano de 44 años que se lesionó el tobillo cuando hacía en solitario la Arista Murciélago, del pico Aspe; y a una guipuzcoana de 26 que en el descenso del mismo pico sufrió un ataque de ansiedad y no podía seguir.
El sábado, dos senderistas, un cántabro de 29 años y una barcelonesa de 38, que realizaban una travesía circular por el pico Anayet, pidieron auxilio a las 3 de la madrugada porque no conseguían ubicarse en la senda. Estaban en una zona rocosa, no podían continuar y se les echó la noche encima. Además, hacía mal tiempo, llovía mucho. Se mantuvieron a refugio y abrigados con los sacos que portaban hasta la mañana siguiente, cuando el Greim los localizó ilesos y los evacuó hasta Jaca.
A lo largo del día hubo otros dos accidentes, de una senderista oscense de 40 años, que se fracturó el tobillo en los Llanos de Lalarri, en el valle de Pineta (Bielsa); y de una madrileña de la misma edad y con la misma lesión en las cercanías de las Gorgas de San Julián (Nueno).
El último rescate se ha realizado este domingo. Igualmente debido a una lesión de un tobillo en Panticosa, en el descenso del pico de Batanes. La evacuada es una vecina de Pamplona de 28 años.
