La muerte de un agricultor en Tamarite eleva a 18 los trabajadores fallecidos este año en Aragón
UGT Aragón demanda un plan de choque urgente al nuevo Gobierno de Aragón, ya que las cifras se acercan ya a las de todo el 2022.
El goteo de trabajadores fallecidos en Aragón no cesa, especialmente este verano y sobre todo en la provincia de Huesca. A las negras cifras que dejó julio se sumó la noche del domingo el trágico accidente sufrido por un agricultor en Tamarite de Litera al volcar el tractor que conducía.
Con él ya son 18 las víctimas mortales desde enero en la Comunidad Autónoma, una estadística que se acerca a las 24 registradas en todo el 2022. Para el sindicato UGT, los datos de este verano resultan "insoportables", por lo que ha reclamado al próximo Gobierno de Aragón la creación de un plan de choque urgente contra la siniestralidad laboral.
"Se deben poner todos los esfuerzos necesarios sobre la mesa para acabar con una lacra social que año a año se lleva la vida de cientos de personas, algo inaceptable para un país que aspira a consolidar unos estándares de calidad de vida y estado de bienestar como el nuestro", ha señalado UGT en un comunicado.
La última víctima es un agricultor de 57 años de la comarca de la Litera que sufrió un accidente con su tractor en Tamarite. El fallecido circulaba por un camino de tierra cuando a las 21.05 se salió de la vía y volcó. El conductor quedó atrapado y tuvo que ser excarcelado por los bomberos. Finalmente falleció.
La provincia de Huesca está sufriendo especialmente la siniestralidad laboral este verano. En apenas un mes han perdido la vida cinco trabajadores. El primero, el 3 de julio, fue un empleado autónomo que quedó atrapado en una mezcladora cuando realizaba labores de mantenimiento en la fábrica Piensos Costa de Fraga. Le siguieron un operario que recibió un golpe por la caída de material en las obras del tramo ferroviario situado entre Caldearenas y Anzánigo; un agricultor de Bárcabo que quedó atrapado bajo la cosechadora; un albañil al caer de un tejado en una casa en rehabilitación en Albelda; y el tractorista de Tamarite.
Además, en julio, se produjo un nuevo siniestro mortal en el derribo de un viejo edificio de Calatayud, en la provincia de Zaragoza; y en la de Teruel, un trabajador falleció aplastado por una máquina en Orihuela del Tremedal, en las obras de renovación del alcantarillado.
José de las Morenas, secretario de Salud Laboral de UGT Aragón, se ha referido a los elevados datos de siniestralidad este año en la Comunidad, que ya se acercan a los de todo el 2022, "cifras más que peligrosas". "Todavía nos quedan cuatro meses para acabar el 2023 y en septiembre se recupera gran parte de la actividad", ha recordado.
Los accidentes se han concentrado en el último mes y especialmente en los sectores de la construcción y la agricultura. "El manejo de la maquinaria agrícola supone un peligro y en el caso de los tractores muchos no cuentan con sistemas antivuelco que puedan evitar el atrapamiento del conductor", ha dicho.
El accidente de Tamarite se produjo a última hora del domingo, pasadas las nueve de la noche. "Por el calor se empieza a trabajar más tarde y se estira la jornada. Son tareas penosas y trabajos duros, que a veces generan fatiga, aunque lamentablemente no podemos saber las circunstancias por el trabajador ha fallecido.
