Bomberos, Policía Local y empleados de Servicios Generales y Medio Ambiente del Ayuntamiento de Huesca trabajan intensamente desde primera hora de la mañana de este viernes para devolver la normalidad a la ciudad tras los graves daños ocasionados por la tormenta. Las fuertes rachas de viento que barrieron la ciudad a última hora de la tarde de ayer afectaron sobre todo al arbolado urbano, rompiendo ramas pero también arrancando árboles de raíz. 

Así ha amanecido Huesca tras el vendaval

Los trabajos se dirigían anoche a verificar riesgos y afrontar soluciones urgentes a los mismos y con la luz del día se ha podido empezar a retirar los restos vegetales. El jueves ya hubo que tomar la decisión de talar algunos ejemplares de gran tamaño, como uno de los emblemáticos cedros del paseo de Ramón y Cajal ante el peligro que suponía. "Había quedado considerablemente doblado a causa de la tormenta y presentaba riesgo de caída sobre un bloque de viviendas", explicó el Ayuntamiento. El viento también arrancó pinos de cuajo en el entorno del Hospital Provincial.  

Los bomberos recibieron alrededor de 45 avisos en tres cuartos de hora. El parque de Miguel Servet se tuvo que cerrar y hoy continúa vallado por los numerosos destrozos en el arbolado. A pocos centímetros del monumento de las Pajaritas, tan querido por la ciudad, cayó un árbol arrancando incluso el pavimento de hormigón.   

También se han acordonado otras zonas por riesgo de caída de ramas y se impide el acceso a algunos caminos, como la popular senda de la Fuente de Marcelo, sobre la que han caído varios pinos. 

Javier Navarro

La alcaldesa de Huesca, Lorena Orduna; el concejal de Medio Ambiente, José Miguel Veintemilla; y la concejala de Seguridad Ciudadana, Gemma Allué; recorrieron las zonas afectadas y estuvieron valorando los daños junto con brigadas, bomberos y Policía Local. Esta mañana está prevista una rueda de prensa en el Ayuntamiento para informar de las consecuencias de ese episodio. 

Daños en Monzón y Binéfar

Huesca no fue la única localidad afectada. La tormenta recorrió la provincia de oeste a este y provocó la caída de árboles también en otras zonas. En Binéfar causó graves destrozos en la zona del restaurante del centro deportivo del Segalar, sin que se hayan producido desgracias personales, según el Ayuntamiento, que hoy iba a evaluar los cuantiosos daños por caída de los pinos y habilitará una solución para mantener el servicio de bar mientras se llevan a cabo los trabajos de rehabilitación. 

Ayuntamiento de Binéfar

Las fuertes rachas de viento ocasionaron la caída de unos 30 árboles en el municipio de Monzón. Algunos obligaron a cortar carreteras como la de Selgua a Barbastro y en el polígono de la Armentera a su paso por Metalogenia. La centralita de la Policía Local recibió una gran cantidad de llamadas informando de las incidencias.

El concejal de la Brigada de Servicios, Salvador Sarrado, ha detallado las principales afecciones con árboles derribados por el viento en las calles Castilla, Huerva, Piscinas de Selgua, Rambla del Canal de Aragón y Cataluña, carretera Selgua-Barbastro, Centro Reina Sofía, parque Baltasar Gracián y los polígono Paules y Armentera, donde un vehículo chocó esta mañana con un árbol.

La tormenta también afectaba al tejado y la veleta de la iglesia de Selgua y a la zona de la calle Joaquín Costa. Además, se produjo un reventón, se inundaron los pasos de ferrocarril y diversos tendidos eléctricos se vieron dañados.

Salvador Sarrado ha agradecido el esfuerzo de la brigada municipal de servicios, Policía Local y la empresa de limpieza viaria que desde la pasada madrugada están trabajando sin descanso para recuperar la normalidad cuanto antes. "Hemos iniciado retirando los árboles que impedían la circulación y el tránsito en las calles para después acudir a las cuestiones de menor entidad”, ha dicho. Puntualmente han colaborado también en las labores los bomberos y la Guardia Civil de Tráfico.

Asimismo, el suministro eléctrico se vio afectado en Berdún, Sariñena o Graus, con cortes provocados sobre todo por la caída de ramas sobre las líneas eléctricas. Según Endesa, la única incidencia reseñable que se mantiene está en línea de media tensión de Albelda, con 300 clientes sin suministro, en cuya reparación se está trabajando. 

En Bailo el viento llegó a alcanzar rachas de 126 kilómetros por hora. Además, se produjeron fuertes precipitaciones, sobre todo en el Pirineo, con 40 litros por metro cuadrado en Bielsa y 31 en Canfranc, pero también llovió intensamente en Sariñena y Almudévar.