Tormenta de granizo en Monegros: "Habrá que entrar y cortar la alfalfa, pero solo recogeremos palos"
La piedra caída la tarde del pasado domingo ha causado graves daños en campos, huertos y almendros de Frula, Almuniente y Valfonda de Santa Ana.
A tres días de llevar a cabo el primer corte de alfalfa, y probablemente el mejor de la campaña, ya que los siguientes podrían verse afectados por la sequía, Óscar Artigas, vecino de Frula, calcula que ha perdido el 60% de la producción esperada. A unos metros de su finca, hay un campo de cebada con graves daños y otro de colza arrasado. Además, su vecino de linde, Adolfo Jiménez, se quedará este año sin recoger tomates, sandías o melones.
El escenario de esta zona agrícola es solo un ejemplo de los daños causados por la fuerte tormenta de agua y granizo que la tarde del pasado domingo descargó sobre las poblaciones de Frula, Almuniente y Valfonda de Santa Ana. En la primera, y como ejemplo, se recogieron más de 60 litros y además, la piedra superó el tamaño de un huevo de codorniz. De momento, no hay una estimación sobre el número total de hectáreas afectadas, pero son muchas, entre campos de cultivo, huertas y plantaciones de almendro.
"Nunca había visto unos daños tan importantes en la alfalfa, ya que es un cultivo duro, pero ha quedado completamente chafado. La piedra ha roto la práctica totalidad de la hoja", ha asegurado Artigas, que estaba esperando a que las lluvias cesaran y el terreno se secara para llevar a cabo el primero de los cortes. "Habrá que entrar y cortar, pero solo recogeremos palos", ha aseverado, calculando que "como mínimo" habrá perdido el 60% de la producción del campo. "Las pérdidas económicas van a ser muy importantes; ha dejado algunos campos machacados", ha indicado.
La misma situación se repite en otras explotaciones de cebada, trigo o colza de Frula, Almuniente y Valfonda de Santa Ana, con daños desiguales, que se mueven entre el 20 y el 80%. Además, el granizo ha dejado en el suelo una gran parte de la producción de las extensiones de almendros.
Aunque el valor económico sea menor, también "duele" ver el estado de los huertos, donde el granizo ha arrasado las plantas de judías, pimientos, melones o sandías. "Ha machacado casi toda la producción", ha lamentado Adolfo Jiménez, vecino de Frula, fijándose en sus tomateras, que están rotas y semienterradas en el embarrado suelo. "El huerto es mi ilusión. Trabajo todo el año para obtener buenos productos y compartirlos con la familia", ha lamentado este agricultor ya jubilado.
"La tormenta fue muy intensa y se alargó durante casi dos horas, dejando una panorama desalentador en una parte importante del municipio", ha lamentado el alcalde de Almuniente-Frula, Joaquín Monesma. "Aunque estamos en una zona de regadío, el año ya era complicado por la sequía y ahora, todavía más; ha sido un varapalo para muchos agricultores, que han visto cómo se iba al traste el trabajo de todo un año", ha añadido. "También -ha continuado- es muy triste ver el estado en el que han quedado los huertos, ya que la mayoría son regentados por gente mayor, que invierte mucho trabajo e ilusión".
Aunque el granizo también cayó con fuerza sobre el núcleo urbano de Frula, los daños han sido menores, gracias a la propia colaboración de los vecinos, que salieron a la calle con botas de agua y cepillos para garantizar el buen funcionamiento de los desagües. El agua llegó a anegar la carretera entre Frula y Almuniente. También se produjo la caída de algunos árboles.
Mientras tanto, este lunes también ha caído una fuerte tormenta de granizo en la Comarca Comunidad de Calatayud que ha causado daños en cultivos del río Manubles.
