Peligra la única escuela sin deberes ni exámenes de Huesca por falta de alumnos
El centro Tumwaco, que ofrece un modelo de educación libre desde 2016, necesita al menos dos matrículas antes del 23 de junio para seguir abierto el próximo curso.
Una simple receta de cocina como la elaboración del pan puede ayudar a aprender escritura cuando se hace la lista de ingredientes; lectura cuando se repasan los distintos pasos a seguir; matemáticas cuando se pesan las cantidades de cada producto (en gramos, litros...); arte cuando se hace una manualidad relacionada; y psicomotricidad fina cuando se hace la masa. Este es solo un ejemplo del método de educación libre y alternativa que promueve la escuela Tumwaco, la única que puede presumir de no tener deberes ni exámenes de la ciudad de Huesca y cuya supervivencia está ahora en serio peligro después de siete años de andadura por falta de alumnos.
El centro, que ofrece un espacio de aprendizaje activo a partir de los dos años, se está planteando cesar su actividad por no alcanzar el mínimo de inscripciones necesarias. De momento tienen cuatro alumnos apuntados para el próximo curso y necesitan al menos dos mas. "En realidad serían seis, pero hemos bajado el listón al mínimo posible para poder seguir adelante con este proyecto", explican Virginia Val y Mari Loli Agüera, las dos educadoras que están al frente de la gestión. Se han marcado el 23 de junio como plazo límite para tomar una decisión definitiva.
Tumwaco abrió sus puertas en 2016 en una casa de dos plantas de Ciudad Jardín, en el barrio de Santiago. Desde entonces más de 30 niños y niñas han asistido a esta escuela que ofrece un modelo de aprendizaje basado en pedagogías alternativas como Montessori, Waldorf o Rebeca Wild.
En este último curso han contado con 15 estudiantes de entre 2 y 15 años, pero de cara al próximo la mayoría ya han anunciado su marcha, bien porque pasan al instituto para poder obtener el título de la ESO, bien o porque sus padres se han mudado a otra ciudad por lo que el número de alumnos que se quedan es "insuficiente" para mantener en pie este espacio, aseguran. Aunque están abiertos a todo tipo de edades, hacen un llamamiento especial a familias con niños y niñas de entre 2 y 5 años para garantizar la continuidad del proyecto a más largo plazo.
Tumwaco es una asociación en la que las familias abonan mensualmente una cuota con la que se paga el alquiler, las facturas y el contrato de estas dos educadoras, que asumieron en enero la dirección del proyecto. “Para nosotras sería una pena tener que cerrar, por eso estamos haciendo lo necesario para darlo a conocer", subrayan.
Su sistema de enseñanza es respetuosa con los ritmos y necesidades de cada niño, "algo que sin duda se puede hacer también gracias a la ratio, que es mucho menor que la de otros centros convencionales ya que en las escuelas infantiles o guarderías hay 15 o 20 niños por educadora y en Tumwaco, de cinco a siete", resaltan.
El centro dispone de salas adaptadas para cada actividad: matemáticas, juego libre, lectura, artes y un jardín que invita a la exploración y a la creatividad. Además de fomentar el juego libre, realizan excursiones para poder aprender sobre distintas materias y trabajan mucho con experimentos. "No mandamos ni deberes ni exámenes, aunque los alumnos son libres de hacer más actividades en sus casas", señalan.
