Los Bailadores de Santa Orosia celebran 400 años de tradición, folclore y dances

En sus inicios hubo 8 bailadores y ahora el grupo está formado por 17, además de 10 niños de entre 8 y 13 años que aseguran el relevo generacional. Y un músico. 

Bailadores en la procesión de Santa Orosia, en Jaca, el año pasado.
Bailadores en la procesión de Santa Orosia, en Jaca, el año pasado.
Laura Zamboraín

El concejo de Jaca aprueba en 1623 pagar 40 reales a unos mancebos para realizar sus bailes rituales durante los cultos festivos en honor a su patrona Santa Orosia. Eran bailes de castañuelas interpretados por ocho bailadores, con cascabillos en sus trajes. Esta es la primera referencia documentada de la existencia de los Danzantes de Jaca, cuya historia prosigue durante los 400 siguientes años que se cumplen en este 2023. Por ello, el Grupo Folklórico Alto Aragón, con objetivos divulgativos, de fortalecer la tradición y engrandecer los ritos “Orosianos”, han elaborado un amplio programa para conmemorar este cuarto centenario de los Bailadores de Santa Orosia.

Este dance tuvo una cierta decadencia en 1922, cuando el ayuntamiento jaqués y la cofradía de Santa Orosia deciden suprimir los antiguos bailes de castañuelas que ya no tenían el esplendor de antaño y formar un dance de palos, más atractivo y que tenía en Yebra de Basa un ejemplo a imitar. Pero los bailes de castañuelas no desaparecieron, quedaron en suspenso. Pero el Grupo Folklórico Alto Aragón se propuso, desde su creación en 1975, recuperar y difundir elementos del folclore que habían caído en el olvido. En esa línea de trabajo comenzaron a interesarse por un dance de castañuelas que había existido en Jaca. El resultado fue que el 25 de junio de 1979 los bailadores de Santa Orosia volvían a acompañar a la patrona de Jaca. La capital jacetana “puede presumir de contar con dos dances vivos y distintos –de castañuelas y de palos- que conviven en perfecta armonía y pujanza. Dos dances que seguro han contribuido a que el conjunto de romerías, ritos y tradiciones que giran en torno a Santa Orosia haya sido declarado Bien de Interés Cultural”, señala Fernando Estallo, presidente del Grupo Folklórico Alto Aragón.

“En el año 79 se ponen en marcha de nuevo los bailes de castañuelas y se crea la condición indispensable para que puedan salir, la música, que es parte fundamental”, explica Manuel Tomeo, miembro del Grupo. A los instrumentos principales, la gaita aragonesa y la dulzaina, “se suman otros dos, el salterio y el chiflo, que motivan la recuperación de melodías”.

Los Bailadores de Santa Orosia van vestidos de blanco. Los trajes actuales son copia fiel de los 12 ejemplares antiguos que se conservan guardados en dependencias de la Catedral de Jaca, y están formados por una chaqueta de talle corto, calzón, camisa de algodón, marinetas, medias, ligas, alpargatas, fajas de lana, mantón terciado al pecho, un pañuelo en la cabeza y el bonete montañés (sombrero de paja sobre el que se colocan lazadas multicolores que lo recubren”. No puede faltar el clavel rojo en la boca y las castañuelas de ‘bucho’ (boj).

En sus inicios hubo 8 bailadores y ahora el grupo está formado por 17, además de 10 niños de entre 8 y 13 años que aseguran el relevo generacional. Y un músico. Su repertorio cuanta con hasta 14 bailes, los de la procesión que son ininterrumpidos y sirven para avanzar o retroceder hacia la urna de Santa Orosia y los que se ejecutan en la plaza Biscós, durante la veneración de las reliquias de Santa Orosia, y que requieren un espacio más amplio y tiempo de ejecución para formar coreografías más complejas.

Los Bailadores de Santa Orosia sólo aparecen en tres momentos del año: el domingo de Trinidad, que participan junto al paloteao en el acto de recepción de los romeros de Jaca que han participado en la romería de la mañana en Yebra de Basa; el día de San Juan (24 de junio), víspera de Santa Orosia, que toman parte de la pequeña procesión que se forma desde la iglesia de las Benedictinas hasta la Catedral; y en la procesión de Santa Orosia, el 25 de junio.

José María Palacio ha detallado la programación que se va a desarrollar con motivo de este cuarto centenario, cuyo objetivo es extender el conocimiento sobre las tradiciones y ritos alrededor de la figura de Santa Orosia, y muy especialmente sobre los dances que acompañan esos ritos. “Fortalecer la tradición acercándola a la gente y engrandecer los ritos de Santa Orosia, impulsando esta tradición, declarada Bien de Interés Cultural en 2017, y prestigiar los dances y músicas que se integran en ella”, añade. Por ello, la programación es “ambiciosa, tradicional y abierta a todo el mundo”. Ya ha comenzado con varios actos más internos y en estos momentos “estamos inmersos en la confección de nuevos trajes de bailador, en concreto 12, que se lucirán en las próximas fiestas de Jaca, manteniendo las telas, colores y cortes tradicionales, características de este dance”. El próximo sábado, 13 de mayo, realizarán una presentación sobre el cuarto centenario de los Bailadores de Santa Orosia, en la Sede de la Real Academia de Nobles y Bellas Artes de San Luis, en Zaragoza, “en la que explicaremos las peculiaridades de este dance”.

Además, durante el mes de mayo, se ha programado el ciclo documental ‘Orosia. Leyenda y ritos’, en el palacio de Congresos. El 22 de mayo se inaugurará en el hall del Ayuntamiento de Jaca la exposición ‘Cuatrocientos años de los bailadores de Santa Orosia de Jaca (1623-2023)’.

En el mes de junio, “colaboraremos con la Diócesis de Jaca y el Museo Diocesano de Jaca para la colocación y exhibición durante este año, de uno de los antiguos trajes de bailador de Santa Orosia, que se conservan en el archivo catedralicio”, señala Palacio. Los días 24 y 25 de junio, los bailadores participaran en la procesión de San Juan y Santa Orosia, luciendo los nuevos trajes y bonetes confeccionados este año. Y el 25 de junio, festividad de la patrona, celebrarán dentro del programa de fiestas de Jaca las XVII Jornadas de Folklore Santa Orosia, en las que siempre participa un grupo de otra comunidad autónoma.

Este año han querido que participase un dance de Aragón, por ello han elegido al Dance de Graus, uno de los más antiguos y espectaculares. Por otro lado, en julio tendrán lugar unas Jornadas de Música y Cultura, con un mercado de luthiers, un encuentro de ‘Flautas de tres agujeros’ en el que participarán músicos y cuadros de baile desde Huelva hasta el Pirineo Francés, pasando por Extremadura, León, Zamora o Navarra. Y por último, el 19 de agosto, los bailadores de Santa Orosia, participarán en el concierto de cierre del ‘Festival en el Camino de Santiago’, junto Al Ayre Español.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión