El MNAC niega la entrada a técnicos aragoneses para estudiar el traslado de las pinturas de Sijena
El Museo Nacional de Arte de Cataluña argumenta que la petición de la DGA es "precipitada" porque el pleito no está resuelto. Aragón lleva tiempo preparando el retorno de los frescos.
El Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC) ha denegado el acceso a los técnicos de la DGA que requerían estudiar y analizar in situ la situación actual de las pinturas de la sala capitular del monasterio de Sijena, con el fin de definir las técnicas necesarias para realizar con total garantía su posible traslado. Su regreso está pendiente de que el Tribunal Supremo confirme la sentencia judicial que ordenó su vuelta en 2016.
La DGA cursó la solicitud el 19 de abril de 2021, a través de la dirección de la Escuela Superior de Conservación y Restauración de Bienes Culturales de Aragón (Escyra), que es la encargada de coordinar y elaborar un protocolo de traslado de las pinturas, que fueron arrancadas en 1936 y que se exhiben en el MNAC.
La respuesta llegó casi un mes después. En su escrito, los responsables del centro expositivo catalán denegaron el acceso a los técnicos aragoneses, argumentando que las obras son objeto de un proceso judicial en el que no hay sentencia firme y por lo tanto, entendiendo que su petición "resulta precipitada".
A la espera del fallo del Supremo, y confiando en que resulte favorable, Aragón lleva tiempo trabajando en el retorno de las pinturas de la sala capitular de Sijena, que están consideradas una obra maestra del arte medieval hispánico. A pesar de la negativa del MNAC, el departamento aragonés de Cultura asegura que tiene ya preparado el protocolo de actuación para cuando se resuelva el proceso judicial.
Y, además, dentro de las obras que se están ejecutando en el monasterio de Sijena, y que están dirigidas a ampliar la actual sala expositiva con el resto de bienes recuperados, contempla establecer un espacio en el que recibir las obras y realizar las adaptaciones que sean necesarias, entre ellas, el análisis de su estado o la situación de los bastidores.
Una operación compleja
Desde la DGA, aunque posible, se entiende que el traslado y recolocación será complejo, lo que llevó a encargar un minucioso protocolo de actuación a los responsables de la Escuela Superior de Conservación y Restauración de Bienes Culturales de Aragón (Escyra), donde, entre otras acciones, ya fue reproducido uno de los arcos de la sala capitular del monasterio de Sijena a escala 1:1 con el fin de realizar ensayos y pruebas de los procedimientos de desmontaje, transporte, restauración y recolocación.
Actualmente, las pinturas murales, que sufrieron graves daños en el incendio que asoló el monasterio en 1936, están colocadas sobre bastidores móviles y además, han sido ya trasladadas para exposiciones temporales en lugares tan lejanos como Nueva York y Londres.
Desde Aragón, y atendiendo a los precedentes de casos similares, se confía en la pronta resolución de los recursos catalanes elevados al Tribunal Supremo. Sin embargo, todavía habrá que esperar, pues hace solo unos días que esta instancia ha admitido a trámite los presentados hace dos años por la Generalitat y el MNAC contra la sentencia de la Audiencia Provincial que confirmó el fallo del Juzgado nº 2 de Huesca ordenando la vuelta de las pinturas murales de Sijena. Los abogados catalanes cuestionan la potestad de la Madre Federal de la Orden de las Sanjuanistas para otorgar poderes legales al Gobierno de Aragón, lo que le permitió iniciar la demanda.
El Supremo también ha admitido el recurso del Ayuntamiento de Villanueva de Sijena, que insta a los magistrados a ser reconocido como parte principal del proceso, es decir, a la misma altura que el Gobierno de Aragón. El consejero de Educación, Felipe Faci, anunció esta semana que se opondrán a los recursos de la Generalitat y el MNAC.
Una inversión de 1,8 millones
A lo largo del pleito, Cataluña también ha alegado cuestiones de conservación, insistiendo en las dificultades del traslado y poniendo en entredicho las condiciones del monasterio de Sijena, donde la administración aragonesa está invirtiendo ahora casi 1,8 millones de euros.
Los argumentos jurídicos juegan a favor de Aragón. De hecho, la sentencia dictada en julio de 2016 dejaba claro que el Museo Nacional de Arte de Cataluña "nunca ha poseído las pinturas a título de dueño", y por lo tanto, al carecer de documento alguno sobre donación o compra, debía atender la reclamación de sus legítimas propietarias -las monjas sanjuanistas de Sijena- y devolverlas a su lugar de origen, del que fueron arrancadas en 1936 sin contar además con el permiso de las autoridades competentes.
Evitar el doble traslado
En 2016, este fallo, emitido por el juzgado de Instrucción número 2 de Huesca, fue ratificado por la Audiencia Provincial. Y, a raíz de ello, Aragón intentó sin éxito que se llevara a cabo la ejecución provisional de la sentencia, a lo que se negó la titular del juzgado oscense, insistiendo en que su fallo todavía podía ser revocado por una instancia superior -el Tribunal Supremo- y por lo tanto, dada la "fragilidad" de las pinturas murales, consideraba necesario esperar a que la sentencia fuera firme con el fin de evitar un doble traslado.
