Alcubierre, Almuniente, Castillonroy y Secastilla compran viviendas para nuevos vecinos

La Diputación de Huesca abre una segunda convocatoria de subvenciones este año para ayudar a los ayuntamientos interesados en adquirir solares o edificios y destinarlos a nuevos moradores.

Una vivienda para nuevos pobladores en Biniés.
Una vivienda para nuevos pobladores en Biniés rehabilitada con ayudas de la Diputación.
Sergio Padura

La Diputación Provincial de Huesca ha abierto ya la segunda convocatoria de subvenciones de este año para que los ayuntamientos adquieran solares y edificios y los destinen a viviendas para nuevos pobladores. Esta línea de ayudas, que complementa a los créditos del Plan de Fomento de la Vivienda de la misma institución, permanecerá operativa hasta el 15 de junio.

El pasado sábado finalizó el plazo para la primera convocatoria, a la que se han acogido los ayuntamientos de Alcubierre, Almuniente, Castillonroy y Secastilla, que van a adquirir cuatro viviendas para la llegada de nuevos vecinos. Han solicitado subvenciones por un total próximo a los 130.000 euros con el objetivo de facilitar el establecimiento de familias en estas localidades.

Ahora se abre una nueva oportunidad para otros municipios con menos de 1.000 habitantes, hasta el 15 de junio. Y habrá una tercera convocatoria entre el 16 de junio y el 30 de septiembre.

Los inmuebles que se generen deben destinarse al alquiler a nuevos habitantes, con una cuota máxima de 255’60 euros al mes y por un mínimo de 2 años. Se entiende como nuevos pobladores a aquellas personas que no estén inscritas en el padrón municipal y que realicen o vayan a realizar su actividad laboral, económica o profesional en el municipio o su entorno. También se puede destinar a jóvenes de la localidad, inscritos en el padrón y menores de 40 años, que establezcan en estas viviendas su residencia habitual.

La cuantía de la subvención, tanto en el caso de la compra de edificios como de solares, será diferente en función de la antigüedad, y es compatible con otras ayudas públicas establecidas por la Diputación para favorecer la disponibilidad de inmuebles dentro de su estrategia de lucha contra la despoblación.

Y es que desde hace tres años, la institución ha habilitado otro programa, el denominado Plan de Fomento de la Vivienda. En este caso, es a través de préstamos sin intereses, con una cuantía máxima de 300.000 euros por ayuntamiento y un plazo máximo de amortización de 30 años. También pueden solicitarlos los municipios de hasta 1.000 habitantes (o con núcleos de hasta 1.000 habitantes) y destinarlos a rehabilitación y/o adquisición de edificios o construcción de nuevos inmuebles, siempre que se destinen al alquiler de vivienda habitual de nuevos pobladores. 

En los primeros dos años, otorgó 35 préstamos para la creación de 65 viviendas. Solo en 2021 se destinaron más de 2,7 millones de euros a 21 proyectos municipales, algunos de los cuales ya cuentan con nuevos inquilinos, como ocurre también con viviendas adecuadas en la convocatoria de 2020.

 

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