La nieve anima una elevada ocupación turística en Navidad con la vista puesta en los datos sanitarios
Las reservas llenan al 80% los alojamientos pero algunos sectores advierten de que se ha frenado la demanda. Las estaciones de esquí encaran las vacaciones pensando en abrir sus pistas al 100%.
Tras un puente festivo de la Constitución que acabó de forma precipitada por los temporales de nieve, el sector turístico afronta la Navidad con buenas expectativas por las elevadas cifras de ocupación, pero sin perder de vista los datos sanitarios y atentos a lo que pase el miércoles en la Conferencia de Presidentes autonómicos.
En el Pirineo, las abundantes reservas de nieve han supuesto un espaldarazo. El valle del Aragón tiene una media de ocupación cercana al 80%, afirma el gerente de la asociación turística, Ángel Bandrés. "En el puente se hicieron bastantes nuevas reservas", señala. A diferencia de lo que ocurre en los negocios de restauración con las comidas de Navidad, los alojamientos no están sufriendo cancelaciones. "La gente viene a esquiar, una actividad al aire libre", comenta, "aunque veremos a ver cómo evoluciona la situación".
En el vecino valle de Tena, la ocupación hasta el día el 27 es del 50%, y a partir de esa fecha sube al 70 o 80%, "a la espera de más reservas aún", indica la gerente de los empresarios, Sandra Lecina, quien coincide con su colega en la alta demanda en los alojamientos enfocados a esquiadores. Un ejemplo en este valle es el complejo Panticosa Resort, que desde el día 26 "está rozando el lleno hasta Reyes", según su director, Jesús González.
En el valle de Benasque, la ocupación es muy alta también a partir del día de Navidad y hasta el final de las vacaciones. "El porcentaje final dependerá de la evolución sanitaria", matiza el presidente de los empresarios, José María Ciria, quien advierte de que grupos familiares han anulado habitaciones para Nochebuena. "Evitan juntarse pensando sobre todo en los abuelos", declara, en referencia a una tendencia que ha crecido en los últimos años de pasar estas fechas fuera de casa.
Por su parte, Anabel Costas, vicepresidenta del sector de Hospedaje de la Asociación Provincial de Hostelería y Turismo, añade que también hay gente que huye de los cotillones de Nochevieja. Ella habla de un parón de las reservas. "La prudencia es la tónica estos días. Son muchas las llamadas interesándose por las fechas límites en que se puede cancelar una habitación".
El turismo rural lo está notando especialmente. "Conforme suben los contagios, baja la demanda", afirma Francisco Parra, de la Asociación Turismo Verde, con 4.000 plazas. "La campaña de Navidad empezó muy fuerte, pero está perdiendo fuelle. No se está cancelando, pero sí se ha frenado la demanda". La ocupación es del 70% en casas y apartamentos, cuando otros años rozaban el lleno. "Algún socio dice que tiene grupos familiares que llevaban más de 10 años acudiendo, procedentes de varios sitios, y esta Navidad no se atreven".
En la provincia de Teruel, el presidente de la Federación Aragonesa de Turismo Rural, Jesús Marco, explica propietario de alojamientos en San Martín del Río, explica que las previsiones “pintan muy bien” para este tipo de oferta turística, que estará “a tope” en Nochevieja, sobre todo en las comarcas más turísticas, como Gúdar-Javalambre, Maestrazgo, Matarraña o la Sierra de Albarracín. En algunas de ellas las reservas ya cubren el 80% de la oferta. Menos animada está la Nochebuena y el fin de semana de Reyes está "muy flojito". La apertura reciente de las pistas de esquí de Valdelinares y Javalambre, así como las nevadas registradas animan las expectativas de Gúdar-Javalambre, que presenta las mejores previsiones de la provincia.
Más pesimista se muestra el presidente de Teruel Empresarios Turisticos, el hotelero Roche Murciano, porque, aunque la ocupación para Nochevieja estaba casi al completo en su establecimiento de la capital turolense, la evolución negativa de la pandemia en las últimas semanas ha comportado la cancelación del 50% de las reservas. “Aunque las Navidades se presentaban muy bien -explica- hasta hace pocos días, se han enfriado bastante porque la gente tiene miedo”.
La situación es parecida en la restauración, donde las comidas de grupos poco numerosos se mantienen pero las de más comensales se han cancelado por temor a los contagios. Coincide con Jesús Marco en que Gúdar-Javalambre también es, gracias a la nieve y a la afluencia de turistas levantinos, la mejor comarca “con diferencia” en cuanto a previsiones de ocupación hotelera.
"Encaramos las vacaciones pensando en abrir las pistas al 100%"
En las estaciones de esquí, las expectativas son "realmente muy buenas" pensando en las próximas fiestas. "Ha nevado en abundancia y tenemos una base excelente para continuar la temporada". El director de Formigal-Panticosa, José Antonio Carnicer, es más que optimista de cara a la Navidad. Este fin de semana la estación abrió con 140 km, uno de los dominios más grandes de todo el Pirineo. "Un buen precedente de cara a las vacaciones, porque podemos ofrecer el máximo desnivel en Formigal y Panticosa, desde arriba hasta abajo", aclara. Los espesores van oficialmente de 50 a 200 cm, pero aclara que en algunas partes de la estación son mucho mayores.
Las vacaciones servirán ademas para resarcirse de un puente con mal tiempo, que precisamente dejó la nieve necesaria y demostró que los aficionados "tienen muchas ganas de esquiar". "Las reservas no pintan mal", según Carnicer.
Álvaro Luna, director general de Candanchú, coincide en la valoración de una gran ocupación, a expensas del tiempo. El dominio 100 K Candanchú-Astún alcanza 220 cm de espesor, "siendo conservadores". "Tenemos mucha nieve para encarar la Navidad con una apertura del 100%", asegura.
