"La convivencia del lobo con los rebaños solo se da en los cuentos y en la fantasía"
La ADS Ovioroel, con 50 ganaderos de Aísa, Borau, Castiello de Jaca, Jaca y Santa Cruz de la Serós, que suman más de 22.000 cabezas de ganado ovino y caprino, piden soluciones y diálogo a la Administración.
La ADS (Asociación de Defensa Sanitaria) de ganado ovino Ovioroel, sita en la comarca de la Jacetania, ha manifestado que "la convivencia del lobo, un animal salvaje, con la ganadería extensiva solo se da en los cuentos y en la fantasía". Esta organización, integrada por 50 ganaderos de los municipios de Aísa, Borau, Castiello de Jaca, Jaca y Santa Cruz de la Serós, señala que este animal salvaje "es una seria amenaza para el presente de la ganadería en el medio rural".
Ante los últimos hechos de muertes en ovejas causadas por el lobo, y así confirmadas oficialmente por el Gobierno de Aragón en algún caso, la ADS Ovioroel destaca que la ganadería extensiva es una actividad económica acorde con el desarrollo sostenible que hoy persiguen todas las administraciones para cualquier tipo de territorio. "En especial, es una actividad que genera el mantenimiento del medio rural que, por otra parte, es visitado durante determinadas épocas por una gran afluencia de turistas que buscan precisamente un entorno cuidado y seguro", apostillan desde la Asociación.
Según indican a través de un comunicado, esta es una actividad que, además, contribuye a frenar el riesgo de incendios forestales, ya que este ganado ayuda a limpiar los montes de una forma sostenible y sin necesidad de introducir maquinaria para llevar a cabo estas labores. Resaltan asimismo que, en las últimas décadas, cada vez es menor el número de personas dedicadas al sector primario. A este respecto apuntan que "es fundamental" no ponerles más trabas de las que ya tienen para seguir viviendo y trabajando en estos pueblos pequeños, que cooperan en la vertebración del territorio porque, aún siendo muchos de ellos muy pequeños, "suponen una red de cultivos, pastos y ganados conectados entre sí y que ayudan a hacer el paisaje que conocemos".
Desde la ADS indican que los ganaderos y agricultores son quienes mejor conocen el territorio; son gentes arraigadas a los pueblos que saben que para que sigan teniendo futuro han de cuidarlos. Por ello, apuntan que cuando desde los despachos de las grandes capitales se tomen decisiones que implican al medio rural y sus habitantes, "es imprescindible es que se les consulten las diferentes políticas que se quieren aplicar".
Los 50 ganaderos de esta Asociación suman más de 22.000 cabezas de ovino y caprino, una actividad que complementan con las labores agrícolas, especialmente el cereal. "Se busca poder vivir de este trabajo, no de las ayudas y subvenciones que se puedan dar para lo que dicen es “compensar” la pérdida del ganado por causa del lobo", resaltan.
