El certificado de vacunación reactiva la movilidad en las fronteras del Pirineo

La flexibilización de los requisitos sanitarios para entrar a España desde el pasado lunes ha permitido empezar a reactivar la movilidad en la frontera del Pirineo. Aunque el aumento de visitantes extranjeros es por ahora "tímido", ha supuesto una inyección de moral para los sectores turístico y comercial, que llevan meses congelados. La tendencia se refleja en la afluencia de clientes a las tiendas situadas cerca de Francia, en las reservas para las vacaciones de verano y en los datos de tráfico de los pasos internacionales.

"Un poco ya se empieza a notar y esperamos que a partir de la próxima semana vaya a más", indica Ángel Solans, propietario de varios supermercados en Bielsa y Parzán. Él confía en recibir pronto a los turistas alojados a pocos kilómetros, en la localidad de Saint Lary, donde arranca ahora la temporada termal. "A la tienda vienen muchos vacunados con el certificado en el teléfono móvil".

La misma situación se vive en el sector turístico. Según la presidenta de la Asociación de Empresarios de Sobrarbe, Paz Agraz, las reservas de extranjeros están repuntando, de forma discreta todavía, y cada vez es más habitual encontrarse con visitantes franceses o belgas.

Desde el 7 de junio en España y el 9 en Francia, se permite cruzar la frontera acreditando haber recibido la inmunización completa de la vacuna. Otras opciones para viajar desde 27 estados europeos son una prueba de antígenos rápida (otra de las novedades), una PCR negativa expedida con 48 horas (antes eran 72), o un comprobante de recuperación (prueba de haber superado la enfermedad).

Un 20% más de tráfico

Un inconveniente de cara a la reactivación de reservas internacionales en las vacaciones son las condiciones en vigor para los menores. Aunque los padres estén inmunizados, para entrar a España a través de las fronteras terrestres se requiere cumplir alguno de los requisitos sanitarios mencionados a todos los mayores de 6 años.

La flexibilización se ha trasladado a los datos de circulación. Entre el lunes y el viernes, primeros días con la nueva normativa en vigor, por el túnel de Bielsa han pasado una media de 413 vehículos, una cifra baja comparada con las de antes de la pandemia, pero un 20% por encima del mismo periodo de la semana anterior.

El túnel internacional sobrepasó el viernes los 500 vehículos, un registro que hacía días que no se alcanzaba. "Que se pueda pasar con la vacuna ayuda mucho. El ritmo de inmunización en Francia es similar al de España", comenta el responsable del túnel, Andrés Olloqui.

Por este paso han circulado entre enero y mayo 36.264 vehículos, muy lejos de los 114.646 de los cinco primeros meses del 2019. Sin embargo, mientras en enero de 2021 apenas fueron 7.004, en mayo llegaron a 10.553 (8.485 turismos y 2.068 camiones, autobuses y caravanas). "Un tímido despertar", según Olloqui, que también se explica por la concentración de días festivos en Francia en mayo.

Santiago Fábregas, responsable de otro de los pasos fronterizos, El Portalet, también ve "más movimiento". "No es lo mismo que en un año normal, pero hay más gente en las terrazas y más clientes en las ventas", dice, después de meses sin apenas compradores. Las tiendas que solo abren en temporada alta ya han empezado a subir la persiana mientras se relajan los controles policiales.