La Guardia Civil ha detenido a un hombre por violencia de género y tenencia ilícita de armas y a otro varón como cooperador necesario en este último delito. Fue a raíz de una denuncia por malos tratos cuando los agentes del puesto de Monzón hicieron una entrada y registro voluntario en el domicilio del principal implicado y en el de un familiar, donde  localizaron una escopeta que figuraba como sustraída y a la que le habían recortado los cañones, dos escopetas de perdigones y 15 armas blancas. El juzgado de guardia de Fraga, donde residen los detenidos, los dejó en libertad con cargos.

El arresto tuvo lugar el pasado viernes, 31 de mayo. Tras la denuncia, la Guardia Civil inició una operación, bautizada como Viartan, para localizar al supuesto autor, mientras la víctima era derivada a los servicios sociales para garantizar su seguridad.

En la entrada y registro de los dos domicilios, el del sospechoso y el de un familiar, se encontraron una escopeta a la que se le habían recortado los cañones y que se encontraba denunciada como sustraída desde el año 2014 en Lérida. También se incautaron dos escopetas de perdigones, tres katanas, dos cimitarras y 10 armas blancas de diferentes tamaños, pero de menor envergadura que las anteriores.

El detenido es un hombre de 34 años, al que se acusa de un delito de violencia de género y otro de tenencia ilícita de armas. Al segundo, de 41 años, se le investiga como cooperador necesario en la tenencia ilícita de armas, considerándolo el supuesto autor material de la modificación de la escopeta al recortar los cañones.

En la operación han intervenido agentes de la Policía Judicial y del puesto de la Guardia Civil de Fraga, que contaron con la colaboración para los registros de personal Zaidín, Candasnos y la Policía Local de Fraga. Asimismo, en el juzgado hubo refuerzo para dar protección por parte de la Unidad de Seguridad Ciudadana de Huesca.