Defensa invierte 1,5 millones en la mejora de las viviendas militares de Huesca

Las obras en el cuartel Sancho Ramírez de Huesca, que se reabrirá en el año 2020 como sede del cuartel general de la División Castillejos con 700 militares, avanzan a velocidad de crucero. A los trabajos que se están desarrollando en el recinto y que anteayer inspeccionó el Jefe de Estado Mayor del Ejército (JEME), Francisco Javier Varela, se sumará en unas semanas la intervención en las 36 viviendas situadas en la calle Miguel Fleta, enfrente del acuartelamiento, que ocupará en régimen de alquiler parte del personal que va a trasladarse con las unidades a la capital oscense.

Los pisos son propiedad del Ministerio de Defensa, que ha sacado a concurso esta reforma por 1,5 millones de euros. Es uno de los contratos de mayor cuantía de los que se han licitado hasta ahora con motivo del acondicionamiento del cuartel, donde está prevista una inversión de 11,8 millones para las obras, la instalación de los sistemas de comunicaciones y seguridad y el mobiliario.

El Sancho Ramírez se reabrió a principios de 2018 tras un año de cierre. En estos momentos se realizan obras de acondicionamiento y ampliación para dar cabida al cuartel general de la División Castillejos. 

Recientemente, el Ministerio de Defensa licitó por 1,5 millones de euros (sin IVA) las obras de rehabilitación de 12 viviendas distribuidas entres bloques que están en el recinto del cuartel. La reforma de los pisos y zonas comunes de los tres edificios también es necesaria para utilizarlos como alojamiento por el cierre y traslado de unidades del acuartelamiento Teniente Muñoz Castellanos, en Madrid, a las instalaciones de la capital oscense.

El Sancho Ramírez se reabrió a principios de 2018 tras un año de cierre. En estos momentos se realizan obras de acondicionamiento y ampliación para dar cabida al cuartel general de la División Castillejos.