Así soltó Francia a las osas del Pirineo

Claverina y Sorita, las dos osas liberadas por Francia la semana pasada, ‘aterrizaron’ en el Bearn, la región francesa situada en la frontera con la provincia de Huesca (al otro lado de las comarcas de la Jacetania y el Alto Gállego), a finales de la semana pasada. El Ministerio de Transición Ecológica francés ha difundido un vídeo con la suelta de la primera para dar a conocer cómo se realizó la operación. En él puede verse a un helicóptero de la gendarmería transportar la jaula hasta un lugar indeterminado del Pirineo francés. Una vez deposita en tierra, el agente que acompaña la caja es izado y se abre la portezuela para dejar libre al animal, que sale disparado hacia la libertad, después de días de cautiverio desde su capturada en Eslovenia.

Las imágenes corresponden a la liberación de Claverina, que se soltó el jueves. Su nombre hace referencia a "la heredera" o "la que sostenía las llaves" en el dialecto bearnés. De 7 años y un peso de 140 kilos, es la primera hembra que pisa el Bearn desde hace más de una década. El otro ejemplar, liberado un día después, es Sorita, en alusión a hermana pequeña, de 150 kilos y de un año de edad.

En un comunicado oficial, el ministro, François de Rugy, ha defendido la liberación de las dos osas. En él no hace referencia a si alguna estaba embarazada, como se ha especulado desde sectores opuestos a la suelta. Se explica que la operación la llevó a cabo la Junta Nacional de Caza y Vida Silvestre en cumplimiento del plan de acción para la reintroducción del oso pardo en el Pirineo, con el objetivo de preservar la especie en los Pirineos Atlánticos, ya que solo viven allí actualmente dos osos machos. “No ha sido fácil”, reconoce el ministro, François de Rugy, “Ha habido intentos fallidos en los últimos años, muchos debates y oposición”, añade, pero el patrimonio natural es “un activo” singular a proteger.

Aragón y Navarra se han opuesto a esta medida, al entender que se produce de forma unilateral, pese a que puede tener consecuencias en este lado del Pirineo, donde ya se han instalado otros osos soltados en Francia.

14 años de espera

En ese país, la opinión pública está dividida. Mientras colectivos de ganaderos salían a la calle, cortaban carreteras, hacían barricadas e incluso patrullaban armados para evitar la operación, la ONG Fondo de Intervención Ecopastoral, especializada en la protección del oso y del pastor desde hace más de 40 años en el Pirineo occidental francés y español, recuerda que, desde la muerte de la última osa autóctona, Canelle, a manos de un cazador, “han pasado 14 años esperando esta actuación del Estado para evitar la extinción del oso del Pirineo occidental, donde nunca dejó de estar presente”, en palabras de su presidente , Gérard Caussimont.

En su opinión, “la recuperación de esta especie 'paraguas' símbolo de la biodiversidad pirenaica, en sustitución de las dos hembras muertas en 1994 y 2004 ha tardado demasiado a pesar de 10 años de comisiones, reuniones, inspecciones, viajes de estudios, informes que siempre concluían lo mismo había que soltar osas”.

Esta ONG asegura que el oso hace pocos daños al ganado en la región del Bearn donde los rebaños queseros son vigilados por pastores. Hay 80.000 ovejas presentes en los puertos de los valles bearneses (Aspe, Ossau, Barétous), y no ha habido daños en 2018, ni en 2017, ni en 2016, solo 20 ovejas indemnizadas en 2015, 14 en 2014, 5 en 2013. Las medidas de compensación para lo pastores creadas con los fondos del plan del oso han contribuido a renovar el oficio de pastor: transporte de material por helicóptero, radioteléfonos, ayudas para contratar pastores (hasta 2.500 euros al mes en puerto), mayor porcentaje de ayudas para renovar las casetas, marca de promoción del queso con la imagen del oso…

Gérard Caussimont asegura que, “al contrario de lo que aparenta la agitación de estas últimas semanas”, todos los pastores no están en contra del oso. “La mitad de los pastores del valle de Aspe y una parte importante de los alcaldes de la zona osera han firmado con el FIEP y con la región Aquitania un documento pidiendo al Estado la suelta de las dos osas”. Y añade que las consultas públicas de la prefectura de Pirineos Atlánticos corroboran que la mayoría está de acuerdo. Según una encuesta realizada por 14 asociaciones de vida salvaje, el 73% de los habitantes de la región francesa de los Pirineos Occidentales son favorables a soltar osas en el Bearn.