Huesca

Las nieblas salvan del calor los frutales del sur de la provincia

Campos de frutales en el entorno de Fraga, ayer, bajo la niebla.
Digital Fraga TV

La niebla está siendo la mejor aliada del sector primario en el sur de la provincia de Huesca, especialmente en el Bajo Cinca y La Litera. De hecho, su persistencia permite contener las temperaturas, que están siendo más altas de lo habitual, y de este modo, los árboles frutales entran en un necesario periodo de letargo, lo que permite su descanso y por lo tanto, garantiza un rendimiento óptimo durante la próxima campaña.


Así lo explica el responsable comarcal de UAGA, Manuel Rausa, que, al igual que otros productores de fruta, celebra que se mantenga la niebla, que lleva varias jornadas instalada en la comarca del Bajo Cinca. Por ello, Fraga ha marcado durante los últimos días las temperaturas máximas más bajas de toda la provincia. Por ejemplo, los termómetros registraron ayer un máximo de 9 grados frente a los 13 de Aínsa y los 15 de Huesca. Ante esta situación de inversión térmica, el cereal de invierno ha acelerado su desarrollo vegetativo en diferentes comarcas altoaragonesas, lo que, unido a la persistente sequía, ha obligado a realizar aportaciones extraordinarias de riego. En la capital del Bajo Cinca, la niebla ha acompañado cada amanecer del mes de diciembre y en algunas jornadas, ha sido prácticamente imposible ver el sol. El delegado territorial de la Agencia Estatal de Meteorología en Aragón, Rafael Requena, asegura que se trata de un escenario "relativamente normal, ya que las condiciones son las propicias al encontrarnos con una situación anticiclónica, que impide el ascenso del aire y concentra la humedad en los valles". Además, recuerda que nos encontramos en el denominado "trimestre de las nieblas, que está formado por los meses de noviembre, diciembre y enero".


Del conjunto de España, el récord de días de niebla está en la denominada Plana de Lérida, que tiene una media histórica de 51 jornadas anuales y que incluye en su zona de influencia localidades como Fraga. La niebla es una variable meteorológica que solo se mide en grandes estaciones y por ello, se carecen de datos más concretos sobre la capital del Bajo Cinca. Ahora bien, al encontrarse al final del valle del Ebro, con una menor incidencia del viento, Requena indica que se trata de una de las zonas más afectadas por fenómenos de nieblas persistentes.


Frente a sus beneficios para el sector primario, su presencia dificulta la circulación. Con todo, la niebla, que podría desaparecer mañana con la entrada de vientos del sur, no parece haber provocado un especial repunte de accidentes, según apuntó el jefe provincial de Tráfico, Andrés Fernández del Río. Ahora bien, la escasa visibilidad o la humedad pueden provocar un mayor número de salidas de vía.