​El Ayuntamiento de Almudévar presentará alegaciones contra el embalse y las expropiaciones

El Ayuntamiento de Almudévar ha decidió hacer frente al proyecto del embalse de 169 hectómetros cúbicos que está previsto empezar a construir este año en el municipio y que supone la inundación de más de mil hectáreas. Por ello, presentará alegaciones en el trámite de información pública, tal y como se acordó en la reunión de la Comisión por la Dignidad y el Respeto de Almudévar, que agrupa a grupos políticos, afectados y colectivos sociales (entre ellos sindicatos agrarios, la comunidad de regantes y la cooperativa). «Serán unas alegaciones duras», anunció el alcalde, Antonio Labarta (PSOE). «Se ha venido con la apisonadora. Hemos sido cautos hasta ahora y se han aprovechado de manera desleal, porque es un asunto grave, hay agricultores expropiados que tendrán que cambiar de actividad», declaró. Recordó además que este embalse está vinculado al de Biscarrués, sobre el que la Unión Europea tiene abierto un expediente.

Almudévar es el municipio más afectado, con el 74% de las 1.382 hectáreas a expropiar. Otro 24% están en Huesca y el resto repartidas entre Vicién, Sangarrén y Tardienta. Los afectados han mostrado su malestar, sobre todo por la falta de información sobre los precios de la ocupación y los plazos, y exigen a la Confederación Hidrográfica del Ebro que les dé información. Precisamente, el alcalde recibió ayer respuesta a la petición de entrevista con el presidente de la CHE, Raimundo Lafuente, que curiosamente es autor del anteproyecto. Será el día 30 en Zaragoza.

Antonio Labarta canceló el miércoles la reunión que tenía prevista con el presidente de Riegos del Alto Aragón, César Trillo. Este mantuvo un encuentro ayer con otros alcaldes afectados, los de Sangarrén y Vicién. “Le preocupa que si hay alegaciones a las expropiaciones, no se empiecen pronto las obras”, explicó el primer edil de Vicién, Alfredo Bretos.