Huesca

Montmesa pide que se acote una zona junto a la alberca de Alboré para las grullas

?Quieren evitar que dañen los cultivos durante sus viajes migratorios.

Montmesa pide que se acote una zona junto a la alberca de Alboré para las grullas
Pedro Etura

El núcleo de Montmesa, perteneciente al Ayuntamiento de Lupiñén-Ortilla ha solicitado a la DGA la creación de una zona acotada para las grullas que duermen en la alberca de Alboré durante sus viajes migratorios.


Acuden mayoritariamente en febrero, aunque también ahora en noviembre, en el que es su segundo desplazamiento del año. Como explica el concejal de esta población, Fernando Omiste, se quiere evitar así que las aves causen daños en los cultivos, “como sucedió el año pasado, en el que acabaron con 20 hectáreas sembradas de cereal”.


La zona, recuerda, cuenta con la declaración de ZEPA, esto es, de especial protección paras las aves. “Aquí la producción se realizan en común, bajo el nombre de Grupo Montmesa S. L.”, explica Omiste.


Los agricultores, señala el edil, cuentan con ayudas agroambientales de cara a la solicitud de la PAC (Política Agraria Común) por encontrarse en una zona de interés natural, pero resultan, en su opinión, “insuficientes” al tener que convivir con estas aves.


Solicitan también por ello una línea de subvenciones como la que se aplica en zonas con ecosistemas similares, como la laguna de Gallocanta, en la provincia de Zaragoza, aunque proporcionales a la zona de Montmesa, de una extensión menor.


Las grullas y otras aves migratorias han regresado estos días al citado humedal, situado junto al embalse de La Sotonera, en su segundo viaje del año.


“Marcan el cambio de estación y estos últimos días de buen tiempo las han atraído, pero al llegar el frío, han detenido su paso”, explica Ernesto Sanmartín, presidente de la Asociación Alberca de Alboré.


Como explica, se ha podido observar a estas aves, principalmente, “en grupos pequeños, realizando pernoctas muy cortas, de un solo día”. La especie mayoritaria es, señala Sanmartín, la grulla.


“En el embalse todavía hay agua y eso permite que haya una buena lámina de agua en la alberca sobre la que puedan dormir”, añade el portavoz de la asociación.


Del mismo modo, ha podido verse a excursionistas atraídos por este fenómeno, aunque ahora no son tan numerosos como los que acuden de cara a la primavera. “Ahora se trata más de grupos organizados, de tipo escolar, que realizan visitas guiadas y actividades en la zona”, apunta Sanmartín.


El 1 de noviembre abrió además sus puertas el Centro de Interpretación de la Naturaleza situado junto al humedal y cuya gestión es fruto de la colaboración entre el Ayuntamiento de Lupiñén y la Comarca de la Hoya de Huesca.


Se puede visitar los sábados y domingos de 10.00 a 14.30 y el primero de los días, también por la tarde, de 15.00 a 18.00. Para reservar entre semana se debe llamar al 655 29 29 64 o escribir un correo electrónico a cialbercadelaboré@aragon.es.

Actividades para impulsar la riqueza natural


La Asociación Alberca de Alboré realiza además actividades de dinamización dirigidas tanto a los vecinos como a los visitantes y que tienen lugar, normalmente, a fin de año y en febrero, con charlas, talleres y actividades infantiles.


“Nuestro objetivo es concienciar sobre el potencial ornitológico y medio ambiental que tenemos en el pueblo e impulsar aquellas iniciativas de carácter económico y empresarial que puedan darse”, asegura Ernesto Sanmartín.


Otro de los atractivos de la zona es, recuerda, su famosa manzanilla, “que se produce de forma natural en el monte y se recoge de forma totalmente artesanal”.


A todo ello se une su patrimonio histórico, que incluye el lavadero, además de la iglesia parroquial y la ermita.