CRISIS EN EL PARTIDO ARAGONÉS

El PAR suspende cautelarmente a Mur por liderar el homenaje al tránsfuga Ferrer

Boné no teme que esta decisión tenga "en absoluto" repercusión en el partido.

José María Mur
El PAR suspende cautelarmente a Mur por liderar el homenaje al tránsfuga Ferrer
JOSé MIGUEL MARCO

La Ejecutiva del PAR aprobó ayer por unanimidad suspender cautelarmente de militancia y abrir un expediente sancionador (podría acabar en expulsión) a José María Mur, fundador, ex presidente del partido y senador, por liderar la cena de homenaje al ex alcalde de Teruel, Miguel Ferrer, el día anterior. Esta decisión se había tomado a mediodía y de forma urgente por la comisión de garantías y disciplina del partido y a tenor únicamente de las informaciones aparecidas en los medios de comunicación ayer. Según entiende la dirección, con su actuación, Mur ha ido "contra los fines y objetivos del partido" y ha creado "un claro descrédito y perjuicio a los fines políticos e imagen del PAR".


La tarde fue tensa en la ciudad escolar Pignatelli, donde a las 17.00, estaba citada la ejecutiva, y a las 18.00, el comité nacional, para aprobar la candidatura del PAR de las elecciones catalanas. Pero todo quedó en un segundo plano. Pocos minutos después de las 17.00, el senador Mur abandonaba -sorprendido pero tranquilo, según sus propias palabras- la ejecutiva tras comunicarle la decisión adoptada. La recurrirá, incluso -si es necesario- en los tribunales.


Después, un miembro de la ejecutiva intervino muy brevemente para instar a una reflexión sobre lo ocurrido y advertir de que había problemas en el partido. Nada más. Apenas había capacidad de reacción. Tampoco en el comité nacional, donde sus miembros (muy escasos, solo acudieron 100 de 231) se fueron enterando de la noticia conforme iban llegando. No obstante, algunos aprovecharon la cita para pedir explicaciones y una reflexión sobre las razones que habían llevado a esta situación. Pero apenas hubo debate, pese a que la preocupación se extendió en las filas aragonesistas por las consecuencias que podría acarrear esta medida en el partido. No en vano, Mur es un dirigente histórico.


Pero el secretario general, Alfredo Boné, aseguró tras el comité nacional que la dirección no teme "en absoluto" que repercuta en la formación y puso como ejemplo "la respuesta como un solo hombre y una sola mujer del comité nacional", que -explicó- había aplaudido la medida. "No va a perturbar el papel del partido", dijo Boné, que tampoco temió que Mur pueda liderar una alternativa regionalista. Fue más allá y llegó a decir que la decisión no ahondará en la crisis abierta por Teruel y que incluso "resuelve una parte importante de la crisis". También advirtió de que las críticas a la dirección deben hacerse en "los cauces del partido y nunca fuera de los órganos" (la Ejecutiva no se reunía desde junio).


El presidente, José Ángel Biel, en su breve discurso en el comité, avisó de que estas actuaciones no se pueden consentir y reiteró que la política debe estar por encima de las personas. Pese a la compleja situación que atraviesa el partido, pidió un voto de confianza en él porque aseguró que tiene claro lo que tiene que hacer.