La Federación Nacional de Empresas de Minas de Carbón, Carbunión, defiende que este mineral debe seguir siendo una opción importante en los próximos decenios para cubrir las necesidades eléctricas del país que no satisfacen las energías renovables.

Está previsto que el presidente de Carbunión, Victorino Alonso, participe esta semana en las reuniones que tengan lugar en Bruselas entre los comisarios europeos, representantes de las administraciones públicas y alcaldes de las cuencas mineras.

Aunque ningún portavoz de la asociación empresarial quiso desvelar ayer el planteamiento que Carbunión defenderá ante la Unión Europea, en la página web de esta entidad se indica que es necesario hallar una solución que garantice el consumo de carbón nacional, tanto por el empleo que genera como por su carácter de reserva estratégica.

A través de una carta dirigida a los socios, el presidente señala que el sector lleva muchos años haciendo frente a sucesivos planes de reestructuración, "por lo que su dimensión no puede seguir disminuyendo sin perder las sinergias pretendidas".

Alonso señala que el carbón es el combustible fósil con mayor y más amplia distribución mundial de reservas -130 años en el caso del lignito- y que su futuro pasa por lograr una mayor eficiencia en la generación de electricidad y por hallar tecnologías limpias.