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Educación rescinde al completo el contrato del colegio Navales y ya puede adjudicar de nuevo la obra
En los últimos meses se ha avanzado, de manera paralela, en la negociación con constructoras para que finalicen la primera fase de primaria.
Las familias del colegio Ana María Navales, ubicado en el zaragozano barrio de Arcosur, empiezan a ver la luz tras meses de retraso en las obras. El Consejo de Gobierno, tras el informe favorable del Consejo Consultivo, ha autorizado este martes la resolución culpable del contrato formalizado con la empresa Levantina, Ingeniería y Construcción S. L. (LIC) para la ejecución de 9 unidades de infantil y otras tantas de primaria. De este modo, por fin, el Departamento de Educación podrá volver a licitar la parte pendiente de primaria, cuya construcción se prevé que se retome en junio.
El expediente se inició el pasado 14 de diciembre tras los retrasos y deficiencias acumuladas en la obra, que obligaron en septiembre a que Educación se planteara incluso si podrían comenzar los niños las clases en el aulario de infantil. De hecho, la autorización llegó ‘in extremis’ solo unas horas antes de empezar el curso escolar y, en estos momentos, todavía falta por ejecutar casi la mitad de las instalaciones.
Junto al expediente de diciembre, se abrió otro contradictorio para la determinación de los daños y perjuicios causados y se dio inicio al procedimiento por la vía de urgencia para la adjudicación de un nuevo contrato. Desde finales de marzo, con el objetivo de agilizar al máximo el proceso, se ha avanzado en la negociación directa con las constructoras y se ha aprobado un gasto plurianual de 5,33 millones para sufragar todo lo pendiente.
Además, y hasta que se formalice un nuevo contrato, se ordenó la adopción de las medidas necesarias por razones de seguridad, o indispensables para evitar un grave trastorno al servicio público o la ruina de lo construido, bien con medios propios, bien a través de la contratación con terceros.
Incautación de la garantía depositada
Tras considerar la actitud de la empresa contratista demorando la ejecución de la obra hasta su paralización a finales de noviembre de 2023 como causa de incumplimiento culpable, se ha incautado la garantía depositada, que asciende a 376.016,88 euros. Continúa asimismo tramitándose el expediente de daños y perjuicios causados a la administración educativa por este incumplimiento contractual, con el fin de cuantificar su importe y requerir su abono en lo que exceda de la garantía incautada.
Dada la situación, ya se acordó a comienzos de este año la instalación de siete aulas prefabricadas en la parcela de la denominada Casa del Barrio de Arcosur, emplazamiento cedido por el Ayuntamiento de Zaragoza, para que los alumnos de primaria pudieran iniciar el próximo curso escolar.
