Delegación del Gobierno en Aragón rebaja a ordinaria la crecida del Ebro, pero la UME sigue en alerta en la ribera

En el puesto de mando de Luceni, que supervisa la evolución de la crecida del Ebro, el delegado del Gobierno en Aragón, Fernando Beltrán, ha hecho este jueves una llamada a la calma. Ha dicho que, por el momento, esta es una avenida de carácter ordinario, aunque se estén aplicando medidas de proteción como si fuera extraordinaria, con la Unidad Militar de Emergencias (UME) en alerta trabajando a pie de ribera.

Beltrán ha explicado que en cuanto el 112 elevó este miércoles a nivel 2 la emergencia se solicitó la intervención de la UME, que se autorizó cerca de las 21.00. La Unidad estaba ya activada, dado que ya estaba preparada por si era necesaria su participación ante el temporal de nieve que estos días se está viviendo en el Pirineo. A las 5 de la mañana de este jueves ya estaban a disposición del puesto de mando y han empezado a trabajar.

Respecto a la situación del río, Beltrán ha sido cauto, pero optimista. “La previsión que había de que la crecida pasara de ordinaria a extraordinaria se ha quedado más bien en la línea de lo ordinario pero con suficiente necesidad de atención”, ha informado. Hay un total de 60 personas desplegadas, que se suman a los medios autonómicos, de las diputaciones provinciales y de las comarcas en materia de protección civil.

El delegado ha dicho que los trabajos se concentran en las infraestructuras y de las instalaciones más próximas al cauce, así como de las primeras tareas de achique. “Por el momento estamos hablando de campos y de alguna instalación ganadera pero sin riesgo para los animales y por nuestra parte también la vigilancia de los caminos y de carreteras”, ha señalado.

“Por el momento en Aragón pues estamos teniendo del orden de los 2.000 metros cúbicos por segundo aquí tenemos algo más de 7 metros en Novillas, lo cual es una situación para estar pendiente, pero no es de una alarma exagerada ni estamos hablando del tipo de crecida extraordinaria que hemos tenido en años anteriores”, ha dicho el delegado del Gobierno, que ha añadido que “no ha habido ningún caso de inundaciones de viviendas con lo cual no hemos tenido que desalojar ningún municipio”.

Pese a que la situación en este momento está controlada, Beltrán no ha descartado multiplicar por dos los efectivos de la UME, incluso por cuatro, si el estado del río cambia a peor. También ha apuntado que se podrían pedir nuevos recursos a Madrid si fuera necesario, como drones de mayor peso para poder volar en condiciones adversas de viento.

En relación con las previsiones para las próximas horas, Beltrán ha dicho que a estas horas se prevé que la punta de la crecida llegue a la capital aragonesa a lo largo de la tarde de mañana.

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