Más de 300 jóvenes recibirán 2,6 millones en ayudas a la compra de vivienda en Aragón
El Ejecutivo autonómico ya ha resuelto un tercio de las 425 solicitudes, que superan en más de un millón el crédito disponible.
El Gobierno de Aragón estima que más de 300 jóvenes se podrán beneficiar de las ayudas a la adquisición de vivienda en el medio rural y cada uno recibirá hasta 10.800 euros La partida presupuestaria para esta convocatoria se ha duplicado hasta alcanzar los 2,7 millones de euros, pero aun así no permitirá cubrir todas las solicitudes presentadas y una cuarta parte se quedarán fuera.
El plazo de presentación se cerró el pasado otoño y se llegaron a registrar 425 solicitudes por una cuantía que ronda los 4 millones. Al cierre del pasado ejercicio, la Dirección General de Vivienda había resuelto 158 peticiones, un tercio del total, y los beneficiarios se han asegurado el abono de 1,18 millones. Si la asignación de las ayudas sigue la misma proporción, se cubrirán con creces las citadas 300 solicitudes.
Este respaldo a la adquisición de vivienda está dirigido a menores de 35 años en municipios de hasta 5.000 habitantes y su resolución se está haciendo por estricto orden de presentación entre los que han cumplido los requisitos. La financiación pública alcanzará un máximo de 10.800 euros por vivienda con el límite del 20% del precio de adquisición, sin incluir gastos y tributos, y con viviendas de precio igual o inferior a 120.000 euros, también sin gastos y tributos.
Como se detallaba en las bases de estas ayudas, los beneficiarios no pueden tener otra vivienda y sus ingresos anuales y los de su unidad de convivencia no podrán superar tres veces el Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (Iprem), es decir, los 25.000 euros. En caso de tratarse de personas con discapacidad, estos ingresos pueden llegar a 33.600 euros o a 42.000 en el caso de discapacidades severas.
La directora general de Vivienda, María Pía Canals, considera que la convocatoria ha sido "un éxito" y lamenta que se abriese tan tarde, a finales de octubre, porque de haberse puesto en marcha antes las ayudas estarían ya resueltas y en manos de los beneficiarios. "Sabíamos que había demanda y por eso uno de mis primeros esfuerzos se focalizó en este programa para facilitar que los jóvenes se queden a vivir en sus pueblos", apunta.
Canals ha explicado que ha sucedido igual con el resto de programas del plan estatal de vivienda, ya que cuando accedió el Gobierno PP-Vox al Pignatelli el pasado verano ninguno de ellos se había abierto. "Estaban dotados con 13,6 millones del Estado y 4 de la Comunidad, que estuvieron a punto de perderse, de ahí la celeridad con la que tuvimos que actuar", añade.
