educacion
Nuevo destino para el colegio infantil Virgen Reina de Zaragoza
Miles de aragoneses cursaron su etapa escolar en este centro regentado por las religiosas de la orden de San José de la Montaña.
El histórico colegio infantil Virgen Reina, situado entre las calles Héroes del Silencio y la Paz, donde estudiaron miles de zaragozanos en su etapa de preescolar, entre los 3 y 6 años, se va a convertir a partir de septiembre en una residencia universitaria mixta para el próximo curso 2024-2025.
Después de las fiestas del Pilar, un equipo de trabajadores contratados por la empresa Construcciones y Edificios Lagartijos Celsa S.L. empezaron las obras para reconvertir un edificio de cuatro pisos que se hizo para las clases de los pequeños alumnos y las habitaciones de las monjas de la Orden de San José de la Montaña, que residían en el mismo.
Fuentes de esta empresa confirmaron este martes a HERALDO que el proyecto aprobado por la consejería de Urbanismo del Ayuntamiento de Zaragoza es para convertirlo en habitaciones para 77 universitarios que estén destinados a cursos de la Universidad de Zaragoza y de la Universidad de San Jorge.
La constructora y su promotora proceden de Córdoba, tiene otras residencias similares en Andalucía y otras comunidades autónomas, por lo que considera necesario su apertura en el próximo curso. De hecho, llegaron a barajar prepararlo para 100 estudiantes, pero las exigencias urbanísticas municipales, con un amplio ascensor y dos escaleras, redujeron la capacidad.
Las religiosas de la Orden de San José de la Montaña abandonaron este colegio Virgen Reina, cuyo cartel todavía es bastante visible, en 2011, y todavía se acercan muchas madres y padres que recuerdan cuando llevaban allí a sus hijos. “¿Me deja hacer una foto del interior del edificio? Aquí traje a mis pequeños”, señala una zaragozana al jefe de obras, Marcos Latorre, quien le deja hacerla desde la puerta.
Recuerdos a la monja Madre Angustias
La mayoría de las familias de los alumnos que han pasado por esta instalación nombran a la directora del colegio, María Angustias Calabrús, quien falleció el 27 de agosto de 2015 con 81 años tras haberse ido desde la capital aragonesa a la residencia que estas religiosasa tienen en Barcelona. Esta monja nació en Torredonjimeno (Jaén), fue bautizada como Dolores y se convirtió en el alma del colegio de la calle La Paz.
El Ayuntamiento de Zaragoza ha confirmado a este periódico que ya se autorizaron las obras el pasado 16 de octubre de 2023 para crear una residencia de estudiantes que acoja un total de 67 habitaciones. Tres estarán situadas en la planta baja, destinadas para chavales discapacitados, y la recepción, y otras 64 se repartirán en los cuatro pisos del inmueble. Asimismo, incluyen otras dependencias en las dos plantas de sótanos: gimnasio, biblioteca, comedor y cocina.
Antes de empezar la reconstrucción de las plantas del edificio y el sótano, responsables de Urbanismo del Ayuntamiento reclamaron a la constructora que primero debía afrontar una limpieza por salubridad del mismo ya que lleva cerrado tres lustros. Los trabajadores relatan que al entrar en el antiguo edificio parecía que lo hubieran dejado la víspera.
En la planta baja son visibles todavía las pinturas que daban forma a personajes de Disney como los siete enanitos y otra escena en la que se reúnen el pato Donald y sus hijos, junto a Mickey Mouse, Pluto y Goofy.
No muy lejos se pueden ver los últimos libros educativos y algunos religiosos que dejaron las monjas al irse hace quince años, y en la planta baja todavía resiste un piano sembrado de polvo, que será recuperado para esta nueva etapa.
Las residencias que hay en Zaragoza
Esta tendencia de ofrecer más plazas a los estudiantes universitarios en Zaragoza ya se detectó con la reciente inauguración de la residencia de Pontoneros, que acogió 156 habitaciones del primer edificio del reinto en el pasado mes de septiembre, y está previsto que se completen las 377 que ofrezcan en 2024.
Fuentes municipales inciden en que ofrecer la imagen de Zaragoza como una ciudad universitaria para acoger más estudiantes forma parte de su marco estratégico. Asimismo, en la Universidad de Zaragoza se ofertan 260 plazas públicas en el Colegio Mayor Pedro Cerbuna, frente a las 97 privadas del Colegio Cardenal Xavierre, las 45 del Colegio Miraflores, las 200 del Colegio Virgen del Carmen, y las 56 del Colegio La Anunciata y 40 del Colegio Peñalba.
A estas residencias se suman la Pignatelli de la Diputación Provincial de Zaragoza, situada en la calle Jarque de Moncayo, y la Baltasar Gracián de la DGA, en la calle Franco y López.
