El primer paquete de rebajas fiscales del Gobierno PP-Vox no solo incluirá la deflactación del IRPF y el impuesto de Sucesiones, sino que se ampliará al de Patrimonio a partir de 2024 al aplicarse con efectos retroactivos. Así lo ha anunciado el presidente aragonés, Jorge Azcón, quien ha manifestado que la elevación del mínimo exento de 400.000 a 700.000 euros en Patrimonio beneficiará a los 16.000 contribuyentes que pagan este tributo en la actualidad. Su impacto sobre las arcas autonómicas rondará los 17 millones, según las estimaciones de los técnicos de Hacienda.

En su intervención en las Cortes y en respuesta a una pregunta del portavoz de CHA, José Luis Soro, Azcón ha subrayado que elevará el mínimo exento del impuesto sobre el Patrimonio "exactamente igual" que lo hacen las comunidades gobernadas por el PSOE.  

Según Azcón, unos 16.000 contribuyentes verán reducido este gravamen o dejarán de pagar, a lo que se suma la exención de Sucesiones para unos 150 contribuyentes menores de 21 años y la deflactación del IRPF.

Azcón ha reprochado a Soro que podían haber tomado estas medidas en el Gobierno aragonés hace tres meses. Ha añadido que el Gobierno PP-VOX acometerá la rebaja fiscal respetando la estabilidad presupuestaria de acuerdo con las reglas de gasto que van a entrar en funcionamiento, para evitar que las cuentas de la comunidad queden en manos del Gobierno de España.

El presidente aragonés ha insistido en que la reforma del tramo autonómico del IRPF beneficiará especialmente a las rentas bajas, y ha reprochado a CHA que le interesa seguir con "el mantra de que el centro-derecha gobierna para los ricos".

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Por su parte, José Luis Soro ha replicado a Azcón que eximir del impuesto de Sucesiones a unas 150 personas "es hacer política de clase, beneficiar a los más ricos", política de "mucho ruido y pocas nueces".